Una serie de medidas administrativas está adoptando el Gobierno para subsanar los inconvenientes que están enfrentando exportadores e importadores nacionales que comercian con China.
El detalle de las mismas, explicó ayer el ministro de Hacienda (s), Francisco Moreno, se informará en el marco de la segunda reunión que sostendrán hoy las autoridades con distintos representantes del sector privado.
El personero explicó que desde el Servicio Nacional de Aduanas se apoyará a los distintos gremios que venden al mayor socio comercial del país.
En relación a las facilidades para los exportadores, el director nacional del citado servicio, José Ignacio Palma, afirmó que en este escenario de contingencia se decidió no generar procedimientos sancionatorios ni agregar multas o recargos cuando se modifique alguno de los documentos requeridos de salida, o en el redireccionamiento de las mercancías a otros mercados.
Toda una logística que pasa por los agentes de aduanas.
Respecto a las compras que se hacen desde el gigante asiático, la autoridad sostuvo que considerando que distintas oficinas públicas y privadas han estado cerradas por esta emergencia sanitaria, se estimó que habrá documentación referida a los procesos de importación que no va a estar disponible en los términos que se exigen.
“Para evitar retardo en esas importaciones, estamos instruyendo a que las aduanas que reciben estas mercancías -que son principalmente las regiones de Valparaíso, San Antonio y Metropolitana-, puedan realizar la tramitación sin contar con toda esa documentación, sujeta a un tiempo para que puedan complementar luego adjuntando esos papeles pendientes”, precisó Palma.
Ayer se firmó el instructivo que se está enviado a todas las aduanas del país para poner en marcha la medida, la que se aclaró es excepcional debido a la emergencia.
Consultado si ha existido alguna petición de redireccionamiento de contenedores, Palma indicó que “hay algunas, pero por menores cuantías”.
De todas formas, aclaró que “no es seguro que sea producto de lo que ocurre con el coronavirus o si es por otra situación, como razones de mercado, donde el agente económico haya optado por cambiar de destino”.
En este mismo contexto, el coordinador de facilitación de comercio del Ministerio de Hacienda, Josep Mena, manifestó que lo que está pasando hoy con el coronavirus es que la cadena logística está operando con lentitud.
“En algunos casos, con supermercados allá que están cerrados, le han pedido a la gente que se quede en sus casas y circule menos, por lo tanto, eso hace que sea más lenta la distribución. Por eso, parte de los contenedores que están allá, no tiene que ver con que el puerto no haga la gestión, sino que la cadena logística esté más lenta”, explicó Mena.
Por estas razones, explicó el coordinador, han profundizado la modernización de trámites para tener certificados electrónicos que permitan posibles redireccionamientos más ágiles.
Llamado a la cautela
El ministro (s) Moreno destacó como una buena noticia que a partir del lunes ha existido una reactivación de algunos puertos de China, pero “desde Hacienda consideramos que hay que tomarlo con cautela”.
A su juicio, las disrupciones transitorias no anticipadas en la actividad económica de China tenderán a impactar transitoriamente la demanda mundial y los precios de los principales commodities.
En lo estrictamente económico, agregó, las autoridades chinas han tomado medidas y “creemos que cuando el virus se encuentre controlado y la economía vuelva a funcionar normalmente, China debiese volver a crecer en torno al 6%”.