"Llegó la hora de sincerar" dijo esta mañana el presidente del PPD, Jaime Quintana, a la salida del comité político de la nueva Mayoría. Todo esto en medio de las acusaciones de una precampaña de la Presidenta Michelle Bachelet, a raíz de las indagatorias por pagos de la firma de Giorgio Martelli hacia personeros que jugaron roles clave en el comando de la Nueva Mayoría.
Quintana dijo que "hay que sincerar que antes del proceso de inscripción electoral había un periodo de tiempo donde los diagnósticos, donde los diseños y la planificación electoral eran trabajos necesarios que alguien tenía que hacer, y hubo mucha gente trabajando en esa función. Llegó la hora de sincerar ese periodo, más allá del nombre, el nombre no es lo central".
El presidente del PPD remarcó que "si existió ese período, obviamente fue sin la Presidenta Bachelet" y que "cualquier sinceramiento en ese periodo no puede ser reconocimiento de ningún tipo de irregularidad", aduciendo que se trata de un periodo que "no está normado".
De hecho, la ley electoral chilena sólo regula el periodo desde la inscripción de las candidaturas -90 días antes de la elección- y fija como periodo de propaganda los 30 días previos al proceso eleccionario.
Con todo, manifestó que "ese sinceramiento no puede ser a costa de Rodrigo Peñailillo".
Consultado sobre la posibilidad de eventuales irregularidades en este periodo que llamó a sincerar, Quintana advirtió que "hay que separar la discusiones. Hay una discusión política, que es a lo que yo me he referido, que falta sincerar que hubo un periodo que no está normado, que era indispensable y necesario, y que fue la base que nos permitió finalmente tener a la presidenta y tener un gran resultado electoral. Eso se hizo sin la Presidenta Bachelet".
"Ahora, si en el marco de esas acciones hubo hechos que pudieron haber sido irregulares, eso no lo vamos a determinar nosotros, lo tienen que determinar otras instituciones", remarcó.
