La expresidenta Michelle Bachelet apuntó que algunas enmiendas impulsadas en el Consejo Constitucional "son francamente invivibles entre ellas" y que hay "algunas líneas rojas" que la llevarían a rechazar la propuesta.
En diálogo con "50 años del golpe: Conversaciones con la Historia" de Mesa Central de Canal 13, la exmandataria planteó que se requiere saber "qué clase de Constitución van a presentar al país para el referéndum, porque de las enmiendas que alcancé a leer antes de ir a la reunión con los consejeros y comisionados, hay algunas que son francamente invivibles entre ellas".
"Hay algunas líneas rojas para mí. Yo no podría votar a favor si algunas de estas enmiendas se aprobara", aseguró la expresidenta Bachelet.
"Por ejemplo, hay varias enmiendas para disminuir los derechos de las mujeres. O sea, si tú apruebas algunas de esas enmiendas, el acto seguido va a ser declarar inconstitucional la interrupción del embarazo en tres causales y yo soy una convencida de que son las mujeres las que tienen que tomar esa decisión", señaló.
Igualmente, dijo que "las mujeres son las que tienen que decidir sobre sus vidas, basado en su religión, su tradición, y lo que puede o no puede como familia o como persona sola. Lo que el Estado tiene que hacer es darle todas las posibilidades".
"La otra que también es una línea roja es la enmienda de que por razones 'humanitarias', después de los 75 años vayan los presos a arresto domiciliario, pero según dijo el ministro Cordero en esa misma Comisión, el 80% son personas que están (condenadas) por violaciones a los Derechos Humanos", comentó la exmandataria.
En esa línea, aseguró que "en general, es una muy mala señal. Porque si hay impunidad de alguna manera va a ser visto como impunidad para algunos sectores y de nuevo no sacamos las lecciones y estamos teniendo riesgo de condenarlo".
"Yo entiendo el tema humanitario, pero son riesgos muy grandes que como sociedad no nos hagamos cargo de las cosas y que busquemos... porque la impresión que a uno le queda es que son subterfugios más que un tema humanitario", acusó.