Este viernes el Banco Central publicó el Informe de Cuentas Nacionales, correspondiente a la actividad económica del segundo trimestre de 2017.
El informe señala que la actividad económica registró una variación de 0,9% con respecto al mismo período del año anterior, alcanzando con ello un alza de 0,5% en la primera mitad del año.
Con esto, la economía cierra su peor semestre desde 2009, cuando la economía se contrajo un 0,15%.
En términos desestacionalizados, el producto interno bruto (PIB) registró un alza de 0,7% con respecto al trimestre previo.
El informe señala que el origen del resultado se debe al crecimiento de servicios personales y comercio, que fueron los sectores de mayor contribución. En contraste, las principales incidencias negativas provinieron de las actividades construcción, minería y servicios empresariales.
Desde la perspectiva del gasto, el resultado del PIB se explicó por el incremento de la demanda interna, cuyo efecto fue aminorado por la caída de las exportaciones netas.
El gasto interno aumentó 3,9%, impulsado por el consumo y la inversión. El incremento del primero fue liderado por el gasto de los hogares, en tanto la mayor inversión se explicó por una acumulación de inventarios durante el trimestre, con la cual, la tasa de existencias acumulada en un año móvil, valorada a precios del 2016, se ubicó en -0,5% como porcentaje del PIB.