Durante este fin de semana, un niño mexicano de 10 años estuvo a punto de entregar su consola Xbox a unos delincuentes que intentaron extorsionarlo tras asegurarle que habían secuestrado a su mamá.
Tras recibir un llamado, el menor se dirigió a la estación Chabacano del Sistema de Transporte Colectivo Metro en Ciudad de México, para entregar las cosas de valor que le habían pedido los secuestradores, a cambio de entregarle a su madre. Sin embargo, nadie imaginó que todo se trataba de una extorsión.
El pequeño al llegar a la estación, se acercó a dos policías y les explicó lo que estaba pasando. Ante esto, los uniformados lo retuvieron y se contactaron con su madre, quien aseguró estar bien en su lugar de trabajo, consignó El Universal.
Mientras esto ocurría, su padre fue víctima de los mismos delincuentes, quienes le dijeron que tenían secuestrado al niño, por lo que le exigieron un rescate de 50.000 pesos mexicanos (casi 2 millones de pesos chilenos) para liberarlo.
Una vez que la madre supo todo, llegó a la estación de metro junto al padre, quienes acreditaron con documentos oficiales el parentesco con el menor ante la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), quien fue entregado por los policías, así como las pertenencias que llevaba consigo.
Pese a que los oficiales aconsejaron a los padres presentar la denuncia correspondiente, estos indicaron que no era necesario y prefirieron retirarse del lugar con su hijo.
