Brasil registró en 2022 un récord de 1.410 feminicidios, un número 5 % superior al de 2021 (1.337) y el mayor desde que los casos de homicidios de mujeres motivados por su género comenzaron a ser medidos en el país en 2017, según trascendió este miércoles (08.03.2023).
Tal cifra significa que, en promedio, una mujer es asesinada cada seis horas y media en Brasil por su condición de género, según las estadísticas divulgadas por la organización no gubernamental Fórum Brasileño de Seguridad Pública (FBSP) este miércoles, cuando se conmemora el Día Internacional de la Mujer.
El número de feminicidios ha crecido gradualmente en Brasil desde los 1.046 registrados cuando la organización comenzó a contabilizarlos en 2017, dos años después de que el delito fuera tipificado en el Código Penal.
En sentido contrario, el número total de homicidios de mujeres ha bajado en Brasil desde los 4.558 registrados en 2017 hasta 3.930 en 2022. Igualmente, Brasil ha registrado una reducción en el número de homicidios, sin distinción por sexo, ya que en 2022 se registraron 40.800, con una disminución del 1 % frente a 2021.
Para el FBSP, una de las explicaciones para el crecimiento de los casos de feminicidio es la significativa reducción de los recursos públicos destinados a programas de enfrentamiento de la violencia doméstica y familiar en el Gobierno del líder ultraderechista Jair Bolsonaro (2018-2022).
Esto ha repercutido en un menor acompañamiento de los casos de las mujeres amenazadas, que han quedado desamparadas sin medidas judiciales de protección ante los agresores, que -en ocho de cada diez casos- son los compañeros o excompañeros de vida de las víctimas.
"No estamos hablando de crímenes pasionales sino de una escalada de diferentes formas de violencia, que generalmente comienzan con ofensas y humillaciones, y evolucionan desde la violencia psicológica o patrimonial hacia la violencia física", afirmó Samira Bueno, investigadora del FGSP.
Como parte de las conmemoraciones del Día de la Mujer, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, anunció este miércoles 20 medidas para acabar con la desigualdad salarial y combatir la violencia machista.
Lula, en el poder desde el 1 de enero, ha prometido que su mandato tendrá una visión de género y será totalmente opuesta a la de Bolsonaro, que fue criticado por declaraciones de cuño machista.