Alejandro Kock comenzó siendo solo el kinésiólogo de Iván Zamorano, pero con el tiempo esa relación de paciente-especialista se convirtió en una profunda amistad. Actualmente trabajan juntos en la ciudad deportiva que lleva el nombre del capitán histórico de la Roja. Allí Kock instaló su clínica -Kinex- en el complejo deportivo que funciona en Las Condes.
Desde el punto de vista de un socio, Kock se refiere, en una entrevista con La Tercera, a los problemas legales del ex futbolista, producto de un juicio con tres bancos (BCI, Itaú y Santander), por una deuda cercana a los dos mil millones de pesos.
El especialista destaca que "La cifra no es tan grave como parece". Esto porque según lo que relata "en un año, la Ciudad Deportiva de Iván Zamorano recibe ingresos más altos que esa suma".
De todas formas, afirma que su amigo y socio ya corrigió el error de no asesorarse bien y "hace unos meses contrató un nuevo asesor financiero, un ingeniero. Ahora es mucho más estricto con sus empresas, ya no delega tanto". "Así, estoy seguro de que sabrá salir de este embrollo. Iván es un guerrero, jamás dará su brazo a torcer", añade Kock.
"Iván apostó su patrimonio personal por un sueño, pero debió asesorarse mejor. Como luchador que es, siempre quiso sacar esto adelante solo, con su patrimonio. Ahora ya entendió que eso fue un error", manifiesta el kinesiólogo.