163 cajeros automáticos fueron retirados por los bancos entre mayo y junio de este año, acumulando una disminución de 987 unidades en el primer semestre. Con esto, el total de unidades disponibles llega a 8.195, una disminución de casi 10% respecto de igual período del año pasado.
Así lo arrojan las últimas cifras de la Superintendencia de Bancos e Instituciones Financieras (Sbif), y advierten que el stock podría seguir cayendo, según publicó diario Pulso.
De acuerdo a las cifras, el 40% del total de máquinas que salieron del sistema corresponden a BancoEstado, aunque aclaran que 10 de estos fueron sacados en el concepto de retiro definitivo.
"Hay que hacer la distinción entre cajeros operativos y cajeros retirados definitivamente. BancoEstado tiene la política de no retirar cajeros masivamente y los cajeros que no están operativos actualmente es porque, o han sido siniestrados, y están en proceso de reinstalación, o porque están temporalmente fuera de servicio por trabajos asociados al Decreto n° 222 el cual exige nuevas medidas de seguridad a todos los ATM de la industria", explica la Sbif.
Dicho decreto, emitido el año pasado por el ministerio del Interior, obliga a los bancos a aumentar las medidas de seguridad en aquellos lugares donde un cajero fue robado, y establece plazos para instalar sistemas de transmisión de imágenes, cámaras HD y alarmas, cuya fecha límite venció la semana pasada.
La asociación mantiene negociaciones con el ministerio para seguir con presencia, aunque fuentes de la banca -citadas por el medio- sostienen que hasta ahora el acuerdo es reponer las unidades que sean robadas en aquellas zonas vulnerables del país, pero prevén que la tendencia sobre el stock de cajeros seguirá a la baja.