El Departamento de Trabajo de Estados Unidos anunció este viernes que durante septiembre el país generó 136 mil nuevos empleos no agrícolas, frente a los 145 mil esperados por los analistas.
Los salarios tampoco cumplieron las expectativas, ya que el ingreso promedio por hora aumentó solo 2,9% en lo que va del año, lo que representa el alza más bajo desde julio de 2018.
Sin embargo, la tasa de desempleo dio la nota alegre ya que cayó 0,2 puntos porcentuales, quedando en 3,5%, su nivel más bajo desde diciembre de 1969.
La consultora Capital Economics se mantuvo en la línea optimista y afirmó que "el aumento en las nóminas no agrícolas en septiembre ilustra que si bien el crecimiento del empleo (y la actividad más amplia) se ha desacelerado, no se está derrumbando".
De hecho, en Financial Times, aseguran que los datos muestran evidencia de una contratación más fuerte para el verano (boreal), considerando que la Oficina de Estadísticas Laborales de EEUU revisó al alza las cifras de empleo tanto para julio como para agosto.
Desde Oxford Economics, calificaron esto como "un enframiento, pero no un congelamiento". "Tenemos empresas que son un poco más cautelosas cuando se refiere a contratación, a implementación de grandes aumentos salariales debido a su capacidad limitada para transferir costos más altos y, sin embargo, todavía necesitan contratar empleados", dijo Greg Daco, economista jefe para EEUU de la consultora.
Tras las cifras, el presidente Donald Trump, tuiteó: "Noticias de última hora: La tasa de desempleo, en 3,5% cae a MÍNIMOS EN 50 AÑOS. Wow EEUU, enjuiciemos al presidente (¡incluso cuando no ha hecho nada malo!).
Los datos se dan a conocer en vísperas de la publicación, el miércoles, de las minutas de la Reserva Federal (Fed) de su última reunión de septiembre, cuando bajó la tasa por segunda vez en 0,25 puntos porcentuales. Ese mismo día, el Fondo Monetario Internacional (FMI) publica sus capítulos analíticos que darán pie a la cumbre de la semana siguiente del Banco Mundial y el FMI.
