Un duro inserto bajo el título de “alerta” publicaron la Confederación de la Producción y Comercio (CPC), Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), la Cámara Nacional de Comercio (CNC), la Sonami y la Asociación de Bancos respecto de los avances legislativos que está teniendo la reforma al Código de Aguas en el Senado.
En el texto, que fue publicado en 18 medios de carácter nacional ayer, se señala que la reforma que proviene del gobierno anterior está próximo a pasar a la sala del Senado y convertirse en ley, “afectando uno de los pilares del desarrollo económico y social de todo país: el derecho de propiedad”.
En el escrito recalcan que el derecho de propiedad está protegido expresamente por la Constitución, sin embargo, a través de la ley “se pretende sustitutir el régimen de propiedad privada sobre los derechos de aprovechamiento del agua consagrada en” la constitución.
Los gremios enfatizaron que se pone en riesgo la estabilidad jurídica, dado que queda a juicio de la autoridad administrativa la renovación de los permisos.
“Contamos con que los parlamentarios de las zonas agrícolas se opongan a generarle un grave daño a la agricultura chilena. Confiamos en el compromiso del actual gobierno, como lo señala en su programa, de mantener la certeza jurídica del derecho de propiedad, pilar fundamental de cualquier desarrollo económico y social, presente y futuro de nuestro país”, dijeron.
Reacción del gobierno
El ministro de Agricultura, Antonio Walker, reaccionó al tema y en una carta al director en El Mercurio, señaló que Chile está en medio de una sequía que ya se extiende por 10 años y dice que hay que abordar este tema.
“Debemos actualizar el Código de Aguas para mejorar su aporte al desarrollo sustentable. Es un asunto de Estado cuyo objetivo es llevar el agua a donde se necesita. La politización no ayuda a ello, y por eso invito a un debate eminentemente técnico, respetando tres principios básicos”, dijo.
Con esto, hace referencia a la priroridad para el consumo humano, evitar la especulación y certeza jurídica. “La certeza jurídica en el acceso al agua es esencial para tomar las oportunidades que ofrece el mundo”, dijo.