En una entrevista concedida al canal de televisión "France 2", Christine Lagarde confirmó que se postulará a un segundo mandato en el proceso de selección que debe resolverse en marzo. La exministra francesa de Finanzas se mostró confiada en que el procedimiento judicial que tiene abierto en su país, que aparece como uno de los principales obstáculos a sus pretensiones de continuar al frente del FMI, se resolverá a su favor.
"Sigo considerando que actué en interés del Estado, conforme a la ley", subrayó en relación con ese asunto. Lagarde está encausada por presunta "negligencia" en la gestión de fondos públicos por haber concedido una indemnización multimillonaria del Estado al empresario Bernard Tapie en 2007 mientras estaba al frente del departamento de Finanzas.
Numerosos apoyos
Lagarde reveló que ya ha recibido apoyos "de Francia, del Reino Unido, de Alemania, de China, de Corea, de México" . A ello añaden declaraciones "extremadamente elogiosas" del vicepresidente estadounidense, Joe Biden, y a otras de su secretario del Tesoro, Jack Lew, en las que avanzaba que "esperaba seguir trabajando conmigo". El Gobierno francés ya había manifestado por boca del primer ministro, el socialista Manuel Valls, su apoyo a Lagarde, que en su día fuera ministra de Finanzas de Nicolas Sarkozy.
Sobre las previsiones de crecimiento a la baja presentadas por el FMI el pasado martes, la directora ejecutiva hizo notar que "no son catastróficas" y que, en realidad, respecto al pasado año se espera un aumento de la cadencia en 2016 (3,4 por ciento) y en 2017 (3,6 por ciento). Lagarde defendió, frente a los que alertan del riesgo de la formación de burbujas financieras, el mantenimiento de las políticas de bajos tipos de interés y de inyección de liquidez del Banco Central Europeo, del Banco de Inglaterra o del Banco Central de Japón porque "los precios son extremadamente bajos". Pero también hizo advirtió que "la política monetaria no puede por sí sola" solucionar los problemas, y que junto a la acción de los bancos centrales hacen falta políticas presupuestarias y reformas.