Por José Carlos Prado
El lunes 14 de septiembre la Corfo informó que Rafael Guilisasti renunciaba al Consejo de la entidad, lo cual se había hecho efectivo el jueves 3 del mismo mes. Según comunicó en esa oportunidad la Corfo, Guilisasti había argumentado que su renuncia se debía a “la incompatibilidad absoluta que dicha representación tendría con futuras responsabilidades que asumiré en el ámbito empresarial privado”.
Sólo horas más tarde se supo cuáles eran las nuevas responsabilidades del ex presidente de la CPC: asumía la presidencia de los directorios de las sociedades cascada que controlan SQM.
La molestia que provocó en la Corfo la renuncia de Rafael Guilisasti para asumir la presidencia de las sociedades cascadas de SQM, empresa mandante de filial con la que la estatal mantiene un arbitraje por diferencias en el contrato de arrendamiento de parte del Salar de Atacama, no se hizo esperar.
De ahí en adelante comenzaron una serie de declaraciones cruzadas hasta que Corfo llevó el tema a la Contraloría, alegando que "el ex consejero posee información privilegiada y de carácter confidencial respecto de la cual tiene un deber de reserva. Esta situación y su renuncia para asumir en las denominadas 'Cascadas', a nuestro entender, lo ha puesto en un evidente conflicto de interés".
A través de una solicitud por Ley de Transparencia, T13.cl pidió a la Corfo copia de todas las actas de consejo realizadas durante 2015. Si bien la información no se entregó en su totalidad, la resolución que explica las razones para mantenerlas en reserva detalla que en cinco de las seis sesiones que se habían realizado hasta el 17 agosto se había tocado el caso. Guilisasti estuvo presente en cuatro de ellas, ya que solo se ausentó de la sesión N° 459 del 25 de mayo.
¿Qué se trató en las sesiones?
Desde la sesión N° 457 en adelante la estrategia de Corfo por su conflicto con SQM se tomó la mesa de la corporación. Específicamente, señala el documento enviado por la Corfo, en las sesiones que van desde las N° 458 hasta la N° 461 "se expone a los miembros del Consejo, entre otros temas, la situación legal y estrategia judicial de Corfo en el proceso de arbitraje seguido contra SQM Salar S.A. por diferencias en el pago de las rentas del contrato de arrendamiento de las pertenencias mineras OMA (Salar de Atacama) de propiedad de Corfo, y analiza diferentes escenarios en la materia”, detalla el oficio.
Asimismo, detalla que las cuentas de las actas de Sesión N° 457 y N° 461 (Guilisasti asistió a ambas) “contienen análisis de escenarios y demás antecedentes y datos económicos y comerciales que, atendido el resultado incierto del Juicio Arbitral, permitirán a la Corporación ponderar y resolver, al término del proceso mencionado, la adopción de decisiones relacionadas con sus pertenencias mineras en el Salar de Atacama”.
La respuesta a la solicitud, firmada por Eduardo Bitrán , dice además que se deniega la entrega de información requerida, porque “la divulgación de las Actas N° 457, 458, 459, 460 y 461, requeridas por el solicitante, permitirá hacer públicos aspectos directamente relacionados con la estrategia judicial seguida en el proceso arbitral entre Corfo y SQM Salar S.A., y destinados a respaldar su posición en dicho juicio”. Y advierte que “la publicidad de la información solicitada no haría sino entorpecer la adecuada defensa judicial o jurídica de los intereses de la Corporación (…)”.
Entre los consejos en lo que participó Guilisasti, destaca el del 11 de junio. Fue en esa sesión en que se aprobó por unanimidad de sus miembros rechazar la propuesta de conciliación del árbitro Héctor Humeres.
