Un nuevo estudio académico encontró una correlación directa entre los mensajes en redes sociales del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD) y los crímenes de odio en Alemania. El estudio demostró, asimismo, que cortes del servicio de internet en realidad resultaron en una reducción de los crímenes de odio en algunas áreas.
Karsten Müller y Carlo Schwarz de la Universidad de Warwick en el Reino Unido recopilaron datos de las cuentas de Facebook y Twitter de la AfD para "mostrar que el sentimiento antinmigrante de la derecha (...) predice crímenes violentos contra refugiados en municipalidades con un mayor uso de las redes sociales".
El estudio, titulado "Avivando las llamas del odio: las redes sociales y el crimen de odio", encontró, de igual forma, que "el efecto se reduce fuertemente en los municipios que experimentan cortes de internet en una semana determinada". Los académicos también encontraron evidencia de que los tweets de Donald Trump estuvieron relacionados con crímenes de odio contra minorías específicas que él mencionó, un efecto que se ha intensificado desde que Trump se convirtió en presidente de Estados Unidos.
El poder de Facebook
Los gráficos en el documento muestran correlaciones casi exactas entre los máximos y mínimos en el número de entradas antirrefugiados en las redes sociales y el número de ataques contra los mismos entre finales de 2015 y principios de 2017: el período de mayor afluencia de refugiados de Alemania. Las estadísticas policiales muestran una disminución general de crímenes contra refugiados en 2017. No obstante, este año, 264 refugios fueron atacados.
Lo mismo ocurre con los tweets de Trump: el informe midió las redes sociales por el número de tweets del presidente por semana y lo comparó con los datos de crímenes de odio del FBI. "Encontramos que los tweets de Trump son un fuerte factor de predicción de tales crímenes", escribieron los investigadores. "El efecto funciona exclusivamente a través de incidentes dirigidos a los grupos a los que apuntan los tweets de Trump: los antihispánicos, por ejemplo, no tienen ningún efecto en los crímenes de odio contra musulmanes, judíos, afroamericanos o blancos".
Müller dijo que los investigadores estaban trabajando actualmente para encontrar ejemplos de publicaciones que pudieran estar relacionadas con ataques específicos a refugiados o albergues de refugiados. Como fuente, el estudio utilizó datos recopilados por la organización de refugiados Pro Asyl, que clasificó diferentes tipos de crímenes contra refugiados y solicitantes de asilo.
"Observamos que el efecto más pronunciado fueron los ataques violentos", dijo Müller. "Cuando hubo otros tipos de ataques, por ejemplo, un grupo de personas paradas afuera de una casa de refugiados insultando, no encontramos la correlación con las redes sociales".
El AfD tiene el mayor alcance de Facebook de cualquiera de los partidos políticos de Alemania, con cerca de 400,000 "me gusta" en su página. En comparación, los dos partidos políticos más grandes de Alemania, la conservadora Unión Demócrata Cristiana (CDU) de la canciller Angela Merkel y el Partido Socialdemócrata (SPD) de centroizquierda, tienen alrededor de 170,000 y 180,000 "me gusta" de Facebook respectivamente.
Pero a diferencia de estos partidos, el estudio muestra que la AfD persigue una estrategia de Facebook más abierta, principalmente al permitir que los usuarios publiquen directamente en su página. Y no solo eso: el AfD es el único partido político alemán que no establece reglas de conducta, por ejemplo, amenazar con eliminar material racista. Como resultado, la página de Facebook del AfD obtiene mucha más interacción que la de otras partes.
Esa fue una de las razones por las cuales el estudio se concentra en la página de AfD en Facebook, dijo Müller. "Si miras su página, solo ves una gran cantidad de reacción a todo lo que publican", dijo.
Regulando el odio
Como anotaron los investigadores, las redes sociales, a diferencia de los medios de comunicación, siguen sin estar reguladas. Este verano, sin embargo, el Parlamento alemán aprobó una nueva legislación para frenar el discurso de odio en internet, al amenazar a las compañías de medios sociales con multas de hasta 50 millones de euros si no eliminan los mensajes que violan las leyes alemanas sobre el discurso de odio. Facebook, por su parte, prometió hacer más contra el discurso de odio en su plataforma.
Sin embargo, Müller se mostró ambivalente acerca de si tales leyes podrían ser efectivas en última instancia. "Creo que hay una fuerte disyuntiva: si sigues nuestro estudio, entonces dirías que esas leyes podrían tener un efecto, pero la pregunta es: ¿a qué costo?", afirmó. "Obviamente, tomar este camino de la censura es difícil, porque no está claro exactamente qué califica como discurso de odio y qué no, no es como si todos dijeran directamente: tenemos que matar a todos los refugiados".