Los Oscar quizá ya no sean tan blancos, pero todavía no hablan mucho español.
Al menos eso piensan algunas voces de la comunidad latina, que denunciaron la falta de latinos nominados en las últimas entregas de premios de las academias del cine y la televisión de Estados Unidos.
Pero es indudable el creciente prestigio y la presencia cada vez más arraigada de figuras latinas con poder e influencia en Hollywood.
¿A quiénes nos referimos?
"Los tres amigos del cine"
Entre 2014 y 2016 sucedió algo inédito en la historia de los Oscar que entrega la Academia de Cine de EE.UU.: durante tres años consecutivos, el galardón a mejor director cayó en manos de un cineasta mexicano.
Hablamos de los premios para Alfonso Cuarón por Gravity en 2014 y para Alejandro González Iñárritu por Birdman en 2015 y The Revenant ("El renacido") en 2016.
Cuarón y González Iñárritu forman junto con Guillermo del Toro el grupo que en Hollywood se conoce como "Los tres amigos" del cine y que encabezan la lista de los hispanos más poderosos de Hollywood.
"Lo que estos tres directores están haciendo en la meca del cine es verdaderamente admirable", le dice a BBC Mundo Charles Ramírez, profesor especializado en cine y televisión en la Universidad de Texas.
Ramírez subraya la calidad de las películas de los tres, cada uno en su estilo, con una factura que no tiene nada que envidiar a los grandes éxitos de Hollywood.
"Es como si se fueran alternando para hacer obras maestras", agrega Ramírez, quien apunta que lo positivo de tener latinos que triunfan en todas las disciplinas del cine es que allanarán el camino a otros latinos.
Así lo hacen González Iñárritu, Del Toro y Cuarón, que son polifacéticos y trabajan como directores, productores, guionistas o incluso dibujantes de comics.
Del Toro es el maestro de los efectos especiales y los cuentos de fantasía con algunos toques de cine de terror.
Sus éxitos más internacionales han sido por el momento "Cronos" y "El laberinto del fauno", a la espera de ver la recepción que tiene "La forma del agua", estrenada el 1 de diciembre.
González Iñárritu se dio a conocer con películas emocionalmente complejas como "Amores perros" y "Babel" para posteriormente consagrarse con Birdman y "El renacido".
Por su parte, Cuarón apareció con "Y tu mamá también" y se ganó el corazón de Hollywood con "Harry Potter y el prisionero de Azkaban" y Gravity.
El Chivo Lubezki
La relación de los tres amigos es muy estrecha, generosa y honesta.
Cuarón y Del Toro se conocieron en los 80 y, una década después, conectaron con González Iñárritu gracias a un amigo mutuo, el director de fotografía mexicano Emmanuel Lubezki, conocido como el Chivo.
Lubezki es también una figura con gran peso en Hollywood y se podría considerar "el cuarto amigo".
No en vano ganó con ellos tres Oscar a mejor cinematografía por Gravity, Birdman y "El renacido". "Cada vez que nos vemos", dijo Lubezki, "es como una explosión de creatividad".
El trío de las superestrellas
Estas tres mujeres aparecen sistemáticamente en todo recuento sobre las personalidades más influyentes de Hollywood.
Son la mexicana Salma Hayek, la texana de origen mexicano Eva Longoria y la colombiana Sofía Vergara.
Si bien sus carreras florecieron delante de las cámaras de cine o televisión, ampliaron sus horizontes y se dedican, además de la actuación, a tareas de producción, diseño o gestión de sus propios imperios.
Hayek dio sus primeros pasos en la actuación en México y se trasladó a California a principios de los 90 para probar suerte.
En aquella época solo le ofrecían papeles estereotipados, de empleada de hogar o mujer de bajos recursos.
Sin embargo, la actriz mexicana medró y en 2003 recibió una nominación al Oscar por su excelente interpretación de Frida Kahlo.
Hayek elige sus papeles con mucho cuidado y sus apariciones en la gran pantalla no son ya tan frecuentes. La artista está más volcada en la producción de cine y televisión y el activismo social.
Algo similar sucede con Eva Longoria.
Tras el gran éxito de la serie "Mujeres desesperadas", la presencia de Longoria en nuestros televisores es menor, pero su influencia en Hollywood no ha disminuido. Más bien al contrario.
Le gusta que la consideren texicana y defiende con orgullo su herencia hispana, dándole prioridad a los proyectos latinos.
Se ha llegado a especular con un posible lanzamiento de Longoria a la política para defender los derechos de la comunidad latina.
Durante varios años consecutivos, Vergara fue la artista de televisión mejor pagada, superando también a sus colegas masculinos.
Su interpretación de Gloria en la serie televisiva Modern Family le valió la fama internacional, pero lo que verdaderamente le supone grandes ingresos son sus contratos publicitarios y la variedad de negocios en los que está involucrada.
Al igual que Hayek y Longoria, Vergara hace uso de su poder mediático con el objetivo de "latinizar" Hollywood.
Son tres estrellas que no solo actúan y ponen el rostro a importantes marcas comerciales, sino que además producen películas y programas para la televisión donde los latinos juegan un papel fundamental.
El éxito musical de los Gustavos
En el campo de la música, son varios los compositores latinos que también han triunfado en Hollywood y que echaron raíces en el sol californiano.
Es el caso del argentino Gustavo Santaolalla, que ganó dos Oscar consecutivos a mejor banda sonora original: en 2005 por Brokeback Mountain y en 2006 por "Babel".
Más recientemente ha compuesto la música de la serie de Netflix "Fabricando un asesino" y la del videojuego The Last of Us.
Santaolalla es además reconocido productor y ha trabajado con artistas como Neón, Maldita Vecindad, Fobia, Molotov, Café Tacvba, Julieta Venegas, Juanes, Los Prisioneros o Divididos.
El venezolano Gustavo Dudamel no está relacionado de forma tan directa con Hollywood, pero es otro latino triunfador en California.
Desde 2009, Dudamel dirige la Orquesta Filarmónica de Los Ángeles y su contrato ha sido prorrogado hasta la temporada 2021-2022.
En 2015, a petición del prestigioso compositor John Williams, Dudamel dirigió los números de apertura y cierre de la película "Star Wars: el despertar de la fuerza".
No están todos los que son
La lista de latinos con una voz en Hollywood es por supuesto mucho más amplia.
La productora mexicana Bertha Navarro, la directora colombiana Patricia Cardoso o la actriz America Ferrera, de padres hondureños, son algunas de las otras personas que, desde dentro, intentan abrir las puertas a más latinos para lograr ese Hollywood diverso que, en su percepción, todavía es demasiado blanco.
Sin olvidarnos de actores consagrados como los mexicanos Gael García Bernal y Diego Luna, el puertorriqueño Benicio del Toro o el estadounidense de ascendencia mexicana Edward James Olmos.
Pero queda trabajo por hacer y, según Charles Ramírez, eso también depende de los propios latinos: "Los latinos siguen subrepresentados en el cine estadounidense, pero hay indicios de cambio, aunque sea lento y gradual".
"Al fin y al cabo, Hollywood está interesado en una buena historia que venda entradas y genere dinero", opina el profesor, que pone como ejemplo el rotundo éxito de "Coco", la película de Disney Pixar sobre el Día de Muertos.
"Eso es lo que hay que buscar, buenas historias".