La Universidad San Sebastián (USS) defendió los convenios suscritos con el segundo Gobierno de Sebastián Piñera, que comprometió pagos por hasta 3.500 millones de pesos en parte de organismos dependientes del Ministerio de Salud (Minsal), en el contexto de la pandemia.
Una publicación de Ciper Chile mostró que el Ministerio de Salud fue la segunda entidad que más acuerdos alcanzó con la USS, después del Ministerio de Educación que era dirigido por Marcela Cubillos.
“Desmentimos, de manera categórica, que la prestación de estos servicios se haya hecho de manera irregular. Desde el inicio de la pandemia de COVID-19, la Universidad San Sebastián -así como otras instituciones-, puso a disposición de las autoridades sectoriales toda su capacidad instalada en materia de infraestructura, como también, los profesionales que se desempeñan en las distintas áreas académicas para apoyar a la población ante la grave crisis derivada de la pandemia de COVID-19, declarada en Chile en marzo de 2020”, dijeron desde la USS en un comunicado.
“Es relevante mencionar que todos los procesos se realizaron bajo el marco de la ley de compras públicas, participando la universidad en procesos de selección de proveedores bajo la modalidad de trato directo, tal como lo define dicha ley”, añadieron.
El Ministerio de Salud durante la pandemia estuvo dirigido por Enrique Paris y Arturo Zúñiga fue el subsecretario de Redes Asistenciales. Tras el término del gobierno, ambas exautoridades llegaron a trabajar a la USS.
Desde la entidad académica, sin embargo, recalcaron que distintas universidades se pusieron a disposición del sistema público para colaborar con procesamiento de exámenes y tareas de investigación.
“Cabe recordar, que en ese momento el país estaba bajo estado de excepción constitucional de catástrofe y una alerta sanitaria, que se establecieron para agilizar y dar respuesta oportuna a las necesidades de salud de la población. En ese contexto, todas las actividades fueron reguladas mediante un contrato formal, que establecía de manera clara los plazos, las cantidades de producción diaria, la entrega de resultados diarios y el precio”, dijeron desde la USS.
“La USS participó en los procesos de adjudicación de exámenes PCR contemplando, para estos fines, precios acordes con los volúmenes demandados, que fueron similares, o incluso, menores a lo cobrado por otras instituciones”, recalcaron.
