Un tenso clima, marcado por frenéticas negociaciones, se instaló en Renovación Nacional, a un día de que culmine el plazo para inscribir las listas para definir a la nueva directiva de la colectividad.
La mayoría de la bancada de senadores de la colectividad -Baldo Prokurica, Francisco Chahúan, Andrés Allamand y José García- convencieron en los últimos días al ex timonel Carlos Larraín para que impulse una lista que suceda al actual presidente, Cristián Monckeberg, quien apuesta por un nuevo mandato.
Aunque el propio Larraín había transmitido a la mesa de Monckeberg que declinaría la opción de integrar una nueva directiva -para asumir un rol más activo en la comisión política de la colectividad- en las últimas horas el grupo de senadores redobló las gestiones con el ex timonel, reactivando el plan de que encabece una nueva mesa.
Así, dicen fuentes del partido, Prokurica ha conversado durante la jornada con el secretario general del partido, Mario Desbordes, y la diputada Paulina Núñez, ambos cercanos a Monckeberg. Los mensajes: en primer lugar, la necesidad de negociar una mesa de consenso, con Larraín a la cabeza. En caso contrario, hizo ver Prokurica, los senadores estarían dispuestos a iniciar una competencia con Monckeberg, en una lista encabezada por el ex timonel.
Pese a la presión de los senadores, los mensajes que la mesa ha recibido desde el propio Larraín han sido menos categóricos. Sin embargo, en el entorno de Monckeberg entienden que la presión de los senadores es fuerte y que podría terminar siendo efectiva.
La ofensiva de los senadores está marcada por una evaluación negativa de la gestión del diputado Monckeberg al mando de la mesa. Si bien la actual directiva obtuvo buenos resultados en las pasadas municipales -el partido se convirtió en el más votado de Chile, con más de 800 mil sufragios, y subió de 56 a 68 alcaldes- el diagnóstico de los senadores apunta a la necesidad de un rol opositor más duro ante el gobierno. Lectura que es compartida por Larraín.
En privado, además, en RN dicen que desde hace meses que el senador Allamand mantiene una dura disputa con Monckeberg.
