Este miércoles, la Sala del Senado aprobó la idea de legislar el proyecto de ley que moderniza el sistema de relaciones laborales.

La luz verde a la reforma laboral llegó con 22 votos a favor y 14 en contra, mientras los senadores fijaron como plazo el 7 de septiembre para presentar indicaciones.

"Hemos pasado una etapa importante y vamos a continuar revisando las indicaciones con los senadores y senadoras", expresó la ministra del Trabajo, Ximena Rincón.

"Hemos rechazado el proyecto por el daño que le hace el país", manifestó por su parte el senador Hernán Larraín (UDI), quien señaló que los trabajadores no sindicalizados se verán afectados por la reforma.

La reforma laboral del gobierno contempla entre sus ejes:

  • Cambios en negociación colectiva: Se modifican los procedimientos y se incorpora a trabajadores de obra o faena transitoria y a los sujetos a contrato de aprendizaje. 
  • Sindicato como sujeto principal de la negociación: Se establece que los beneficios de la negociación serán extensivos a trabajadores no afiliados sólo en caso que haya acuerdo entre el sindicato y la empresa.
  • Piso de negociación: Se establece que en el contexto de una negociación colectiva, la respuesta de la empresa deberá contener como piso las estipulaciones y beneficios del anterior contrato colectivo (para estos efectos no se considera el bono de término de conflicto). 
  • Derecho de huelga y prohibición de reemplazo: La empresa no podrá reemplazar a los trabajadores con personal ni interno ni externo. 
  • Servicios mínimos y equipos de emergencia: En caso de ir a huelga, el sindicato deberá proveer de personal necesario para cumplir con “servicios mínimos”. La definición de ambos conceptos podrá acordarse antes de la negociación colectiva o a su inicio. 

El derecho a huelga y los servicios mínimos han sido los puntos más conflictivos del proyecto.

La sesión

Luego de un homenaje póstumo a la folclorista Margot Loyola y la aprobación del proyecto que otorga nacionalidad por gracia al argentino Roberto Kozak -por su apoyo a los presos políticos- la Sala del Senado inició el debate. 

El primero en exponer fue el RN Manuel José Ossandón quien manifestó: "Le pido al gobierno que cambie y corrija este proyecto. Después de haber votado a favor de una reforma tributaria muy mal diseñada y al ver la nula posibilidad de que con este proyecto no pase lo mismo que con el pasado, voy a votar en contra. Pero quiero que sepan que mi voto está para todo lo que sea mejorar un buen sindicalismo y la libertad de los trabajadores".

El independiente en cupo DC Pedro Araya dijo que "lo que busca el proyecto es devolver la titularidad sindical, el derecho a huelga efectiva, sin reemplazos".

"No podemos limitar este derecho de los trabajadores, si la huelga efectiva es el último recurso que tienen los trabajadores. No creo en el discurso alarmista de mis colegas de la Alianza que dicen que esto va a provocar desempleo", agregó.

El parlamentario aseguró que quedan puntos pendientes, como abordar la situación de las empresas con trabajadores subcontratados, y la huelga en las pymes.

Por su parte, el PS Carlos Montes enfatizó que "estamos por mantener prohibición de reemplazo interno, para que la huelga sea efectiva. Estamos abiertos a buscar fórmulas para evitar efectos  indeseados en las pequeñas empresas".

El senador RN Francisco Chahuán advirtió sobre los "perniciosos efectos de esta reforma mal diseñada".

"Se nos impuso acá la lógica de la retroexcavadora. Se necesita una reforma laboral. Pero no esta reforma laboral, que fue hecha para fortalecer a la cúpula sindical", agregó.

El timonel PPD Jaime Quintana refutó lo planteado por la oposición señalando que "este no es un proyecto pro huelga, es un proyecto pro diálogo, es un proyecto que busca fortalecer los sindicatos". 

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