Pablo Cádiz y Karina Zúñiga
La ministra de Salud Carmen Castillo aseguró que enfrentará la acusación constitucional en su contra y descartó de plano la posibilidad de una eventual renuncia.
"Es un comentario del cual no me hago cargo, dado que no es real", aseguró la ministra frente a los trascendidos de una eventual salida del ministerio para evitar el libelo presentado por parlamentarios de la oposición.
Castillo remarcó que "la acusación constitucional la voy a enfrentar y nosotros estamos muy tranquilos porque sabemos que tenemos la certeza de que las respuestas las tenemos elaboradas, sabemos de que pueden estar absolutamente bien respaldadas con todos los antecedentes y hechos reales que hemos efectuado".
La ministra dijo sentirse "absolutamente" respaldada por el Gobierno y aseveró que "estoy segura que lo se está haciendo se está haciendo bien, con las dificultades económicas obviamente, como todos sabemos, pero se están haciendo bien las cosas en mi sector".
Los parlamentarios presentaron ayer la acusación constitucional, denunciando "graves infracciones a la Constitución, además de una serie de incumplimientos en materia de infraestructura hospitalaria, leyes auge y Ricarte Soto".
Junto con esto aseguran que la titular del Minsal no habría cumplido con responder en el plazo legal, un cuestionario entregado durante la interpelación.
Sobre el proceso que deberá enfrentar, Castillo comentó que "para nosotros toda esta situación de la acusación constitucional no es algo habitual y por supuesto que uno hubiera querido trabajar en lo que tiene que trabajar, que es efectuar todas las acciones sanitarias para todo el país".
"Sin embargo tengo que asumir que es un derecho y una facultad que tienen los parlamentarios por lo tanto lo asumimos con mucha responsabilidad y la vamos a responder como tal", agregó.
Hoy la Cámara de Diputados sorteó los cinco parlamentarios que estarán a cargo de analizar el libelo acusatorio, dándose la casualidad que se trata sólo de legisladores del ala de izquierda de la Nueva Mayoría.
Al respecto, la ministra comentó que "es muy importante trabajar con ellos, entregar toda la información como debe ser cualquier acción de gobierno, responsable y con todos los antecedentes".
Los pasos que vienen en la acusación
De acuerdo a las fechas establecidas por la Cámara, la ministra tendrá que ser informada antes del 16 de noviembre y podrá presentar sus descargos hasta antes del 27 de noviembre.
Luego de recibir respuesta o proceder sin ella, la Comisión de Acusación conformada esta mañana tendrá que estudiar los antecedentes y pronunciarse.
La Cámara de Diputados destinará una serie de sesiones para evaluar la presentación, tras lo cual se votará.
De aprobarse, la acusación pasará al Senado, que actuará como juez. Mientras tanto, la autoridad quedará suspendida de sus funciones y podrá asistir a las sesiones del Senado para manifestar su defensa. Incluso podrá recurrir a abogados que sustenten su postura.
Finalmente, se convocará a una sesión especial, donde el Senado votará por separado cada uno de los capítulos de la acusación.
En caso que se apruebe la acusación, la autoridad será destituida de su cargo y no podrá ejercer empleos públicos por cinco años.
Los últimos dos ministros que han sido destituidos han sido titulares de Educación: Harald Beyer, en 2013, y Yasna Provoste, en 2008.
