El ministro vocero de Gobierno, Marcelo Díaz, aseguró que el Ministerio de Educación asumió su responsabilidad por la publicación de un documento su sitio web donde se detallaban nuevos cambios al anuncio sobre el inicio de la gratuidad en 2016.
En el mencionado documento se señalaba que se permitiría que entre los integrantes de las fundaciones que controlan las universidades participaran sociedades comerciales, pero sólo en el caso que dichas corporaciones no eligieran a más del 10% del directorio del plantel y se abría la posibilidad a que universidades con tres años de acreditación pudieran acceder al beneficio.
Sin embargo, uno de los cambios más trascendentales que planteaba el documento era que el beneficio sería para las universidades estatales y para privadas que cumplieran los requisitos de acreditación, no lucro y participación estudiantil. Esta medida, en la práctica, implicaba poner término a la distinción entre universidades del G9 –pertenecientes al CRUCH- y las privadas creadas después del año 1981.
La publicación del documento fue calificado como un "error" por la ministra del área, Adriana Delpiano, quien aseguró que se envió un documento a todos los rectores para clarificar la situación. Considerando este cambio, el gobierno ha mostrado seis posturas sobre el anuncio del inicio de la gratuidad.
Hoy, al ser consultado sobre el impasse, el vocero de gobierno reconoció que "nos encantaría que eso no hubiese ocurrido, la propia ministra lo reconoció de manera directa y asumió la responsabilidad del Ministerio de Educación en esta materia".
"Lo importante es que más allá de eso quiero insistir en algo que puede parecer baladí, pero que es importante reiterar: esta es una reforma muy compleja, porque no solo queremos asegurar gratuidad, es necesario asegurar calidad", remarcó.
Con todo, el portavoz del gobierno sentenció que "esperamos en lo sucesivo, que este tipo de hechos no ocurran, pero que sigamos discutiendo y debatiendo, pero a partir de esta idea, que el objetivo de gratuidad y calidad en educación superior es un propósito irrenunciable".
En relación a las críticas a la apuesta del gboierno de iniciar en 2016 la gratuidad para algunas universidades, el ministro dijo que "nos encantaría que el Estado de Chile tuviera las espaldas financieras para partir de un solo acto con el 100%, pero aquello no es posible porque tenemos que ser responsables con las capacidades del Estado".
"Por eso hemos dicho que esta reforma tiene que hacerse gradualmente, y tenemos que partir incorporando primero un universo determinado de instituciones y beneficiarios, para alcanzar el objetivo de la gratuidad universal", remarcó.
Postergación de proyecto de gratuidad
Por otro lado, el ministro se refirió al anuncio del Mineduc de postergar para diciembre el envío del proyecto sobre gratuidad, que regulará el financiamiento de los estudiantes desde el 2017.
Díaz explicó que "ese proyecto de ley va a iniciar su tramitación legislativa este año, pero va a discutirse por lo menos en buena parte del 2016, de manera tal de estar aprobado para que entre en régimen y sea norma de la República el 2017".