“No puedo dejar de pasar un aviso. Usted decía que voy a competir con mi ex jefe. Bueno, Francois Fillon compitió con su ex jefe y le ganó. No sería el primer caso”.
Fue con estas palabras que en entrevista con Tele13 Radio el ex agente de Chile ante La Haya y hoy precandidato presidencial, José Miguel Insulza, puso las primarias de la centroderecha de Francia como ejemplo para abordar sus posibilidades de vencer al ex Presidente Ricardo Lagos, de quien fue su ministro del Interior.
Y es que en los comicios franceses Fillon logró imponerse con un 44% de las preferencias, superando por amplio margen a Nicolás Sarkozy, de quien fue su primer ministro. Este último quedó fuera del balotage que se realizará este domingo al quedar en el tercer lugar, luego de ser aventajado por otro de sus ex ministros, el ex canciller Alain Juppé.
Pero la elección en Francia no sólo fue sorpresiva por el hecho de que un ex Presidente quedara fuera del balotage tras ser vencido por sus ex ministros, sino porque el resultado estuvo lejos de lo pronosticado por los sondeos de opinión, que dejaban a Fillon en un tercer lugar.
Fue este punto el que utilizó el lunes Ricardo Lagos para desestimar el factor predictivo de los estudios de opinión, los que han sido puestos en entredicho no sólo tras la ocurrido en Francia, sino también del el plebiscito por la paz en Colombia, el Brexit, y el triunfo de Donald Trump en EE.UU.
"No me gusta desacreditar las encuestas, creo que hay que tomarlas en serio. Dicho esto, constato que ayer (domingo) el candidato favorito en Francia por lejos era Sarkozy. Le daban diez puntos de ventaja. ¡Y salió en tercer lugar! Y lo que es peor, todos suponían que quien ganaba en ese caso era Juppé. ¡Y salió segundo! El que ganó, Fillon, estaba en tercer lugar. Entonces yo leo las encuestas. Pero después de lo que le he dicho, ¿qué hubiese pasado si Fillon se hubiese bajado?", expresó Lagos en Radio Zero.
De acuerdo a la encuesta Adimark de octubre, Lagos está tecero en la pregunta de quién preferiría que fuera el próximo Presidente de Chile. El ex Mandatario tiene un 5% de respaldo, detrás del senador Alejandro GUillier, quien marca 15%. El primero en el sondeo es el ex Presidente Sebastián Piñera, con 20%.
En el oficialismo, en todo caso, señalan que el escenario aún no está zanjado: a excepción del Partido Radical, el PS, el PPD, la DC y el PC no han resuelto oficialmente a quién respaldarán para los comicios de 2017, definiciones que podría impactar en términos de opinión pública.
Más allá de eso, ¿Es posible que en Chile se produzca un "efecto Fillon", en que triunfe un candidato que no lidera las encuestas?
Hoy, además de Piñera, Guillier, Lagos e Insulza, varios más han expresado que levantarán una candidatura presidencial, pese a su escasa presencia en los sondeos.
La última Adimark, por ejemplo, mide a Marco Enríquez-Ominami (5%); el senador ex RN Manuel José Ossandón (4%); el diputado de Evópoli, Felipe Kast (1%).
Pero también hay otros que no aparecen en dicho estudio. En el PS, por ejemplo, está el abogado constitucionalista Fernando Atria. En el PPD, el diputado Jorge Tarud. El diputado ex UDI José Antonio Kast reúne firmas para presentarse como independiente. Además, Franco Parisi y Marcel Claude han señalado su intención de volver a competir por La Moneda.
Para algunos expertos, el alto número de nombres tiene relación con un escenario político marcado por una "alta incertidumbre". Para otros, sin embargo, que los políticos desestimen las encuestas para empujar sus planes es una estrategia "antigua", sobre todo si aquéllas no les favorecen.
"Es posible..."
En este cuadro, el director de Adimark, Roberto Méndez, señala que "cuando nosotros venimos saliendo de una elección municipal donde votó el 35% de la gente, yo te diría que hoy día no sabemos nada lo que va a pasar en un año más. De todas maneras tenemos que hacer las encuestas, tenemos que ver qué está pasando con la opinión pública; yo me dedico a eso. Pero obviamente al tomarlas como un hecho definitivo de lo que va a pasar en un año más y bajar candidaturas o subir candidaturas en base a eso no se justifica", agrega.
¿Apuestan bien los candidatos que compiten esperando ser Fillon? Consultado al respecto, el director del centro de estudios señala que "es correcto, un candidato sobre todo en una situación como la que está viviendo Chile, con tanta incertidumbre interna y externa, yo creo que es una posición muy abierta".
"Los que tienen algo que ofrecer, los que tienen un proyecto como es Lagos, como es Insulza, como es Piñera, deben seguir independiente de lo que vayan diciendo las encuestas. Piñera aparece hoy como el favorito, pero el día de mañana podría dejar de ser favorito. ¿Y eso significa que tiene que bajarse? No".
"Incluso es posible que nombres que no aparecen en las encuestas finalmente logren un resultado hoy día imprevisto. Yo creo que las encuestas son una referencia y obviamente que están sujetas a error, y hoy día con esta dificultad para saber quién va a ir a votar, quién no, se ha hecho todavía mucho más difícil", agrega.
Por otro lado, agrega que en el caso de Francia, se trataba de primarias, donde "todavía es más difícil de prededir, porque a quién encuestas". "Yo creo que la sorpresa fue que en definitiva Fillón logró mover y logró llevar a votar a personas que se pensaba que no iban a ir a votar. De hecho, la sorpresa fue que votó mucha más gente de la que se esperaba. Esa es hoy la variable fundamental", señala.
Para Pierre Lebret, cientista político francés pero que reside en Chile, “todos los candidatos hoy día quisieran estar en el lugar de Fillon, porque fue una victoria sorpresiva, nadie se la esperaba, entonces da mucho animo a los candidatos que están bajo en las encuestas”.
Según explica, el triunfo de Fillon tuvo “mucho de reconectar con la ciudadanía en momentos que Juppé y Sarkozy estaban enfrentándose de manera muy personal. El debate se concentró mucho en los ataques entre ambos, y los franceses estaban escuchando bastante más las ideas y propuestas de Fillon”.
Para el cientista político, una de las razones de por qué las encuestas se equivocan dice relación con que “no logran percibir lo que espera la ciudadanía. Hay una gran desconexión de las élites con la ciudadanía, hay una crisis global de cómo hacer política, de qué es la democracia. Y cuando uno escucha a José Miguel Insulza decir que le puede ganar a su ex jefe es un poco sorpresivo, porque no es el objetivo. El objetivo de una precandidato presidencial es justamente trabajar un proyecto país, hacer terreno, y no atacar a los otros candidatos”.
Estrategia antigua
Para el cientista político y académico de la UDP, Alfredo Joignant, “los resultados sirven para justificar todo y cualquier cosa". Joignant -cercano al PS y amigo de Atria- apunta a los dichos de Ricardo Lagos en torno a la primaria en Francia: "en el fondo, lo que está tratando de decir es que si él se baja de una posible competencia primaria producto de que no marca en las encuestas, podría terminar cometiendo un error que no cometió Fillon, quien fue persistente y terminó ganando la primaria”.
“Y José Miguel Insulza hace la comparación desde otro punto de vista, y muestra de que cómo un primer ministro, cuyo equivalente más cercano es José Miguel Insulza, puede ganarle a un ex presidente. Son comparaciones legítimas, pero que forman parte del juego de la política”, agrega.
Por otro lado, sostiene que “las comparaciones con Francia siempre han estado a la orden del día en Chile, porque el sistema de partidos francés es muy parecido al chileno, y la política francesa tiene un fuerte parecido con la política chilena. La misma configuración de la izquierda, una configuración parecida en la derecha, donde la única diferencia relevante es la presencia extrema de la derecha. Yo creo que esa es la base más sustantiva de comparación entre Francia y Chile en la política”.
Para el doctor en ciencia política y académico de la U. de Chile, Robert Funk, en todo caso, que los políticos desestimen en alguna oportunidad los sondeos es un dato antiguo. “Eso siempre existe, los políticos cuando les va mal siempre dicen que no creen en las encuestas”, comenta. Por otro lado, señala que estas críticas se dan en un momento donde “sabemos que hay problemas con las encuestas, problemas metodológicos, logísticos; en Chile que sabemos que las encuestas presenciales son mejores que las telefónicas”.