Un ambiente tenso se respiró ayer en el tercer piso del Congreso Nacional en avenida Pedro Montt, especialmente durante la exposición de la ministra de Transportes y Telecomunicaciones (MTT), Gloria Hutt, quien manifestó a la comisión del ramo del Senado algunas críticas sobre el actual proyecto en tramitación que regula a las plataformas de transportes como Uber, Cabify y Beat.
Los gremios de taxistas, irritados por las palabras de la ministra, fueron silenciados por el presidente de la comisión de Transportes, Francisco Chahuán. ¿El motivo? Dentro de la presentación, Hutt llamó al gremio de taxis a ponerse a tono de los nuevos tiempos, lo que no fue bien recibido.
“Hoy los usuarios en un 81,7% planifican los viajes a través de plataformas digitales”, dijo Hutt, quien agregó que es impostergable que se regule lo antes posible a las aplicaciones de transportes, por lo que valoró que ayer se aprobara en general de la iniciativa en esta comisión del Senado.
“Estamos contentos, porque significa que tendremos un sector que actúa bajo la norma y eso le dará tranquilidad a los usuarios”, afirmó.
Con cuatro votos a favor y uno en contra, el proyecto obtuvo la luz verde de la comisión, cuyo paso siguiente es que se ponga en tabla para pasar a votación en la Sala. Tras esto, -explicó el senador Chahuán-, se abrirá un plazo para hacer indicaciones para mejorar el texto.
Uno de los puntos que abrirá el debate es que se congele el parque de conductores de estas plataformas.
El proyecto despachado por los diputados establece un artículo transitorio donde se fijan tres meses -desde que comienza a regir la ley- para que los conductores de estas plataformas se inscriban en un registro. Luego de eso, se suspenden las inscripciones por 12 meses, para luego habilitar el ministerio para volver a abrir o cerrar el registro.
La ministra Hutt mostró su postura contraria a esta fórmula. “Una cuota fija afectará la calidad de servicio”, señaló sobre la medida que también ha sido cuestionada por las aplicaciones.
Sobre este punto, Chahuán dijo que se trata de una materia “discutible”, dejando la puerta abierta para una posible modificación.
“Nosotros votamos –en general- con condiciones sobre esta iniciativa porque creemos que si bien es necesario legislar, no vamos a generar una competencia desleal con los taxis y eso implica regular en paralelo la relación laboral entre conductores y empresas tecnológicas de transporte”, añadió.
Al finalizar la sesión de ayer, el presidente de la comisión dijo que recibieron casi un centenar de aportes por esta ley, provenientes de gremios, asociaciones y empresas tecnológicas, lo que aseguró “será parte de la discusión particular que se viene”, señaló.
Afirmó que una vez finalizada la ronda de indicaciones y la apertura de la discusión particular, donde se analizará artículo por artículo, habrá cambios en el proyecto, ya que en la primera etapa han recibido más de 100 recomendaciones.
