La Contraloría General de la República detectó 31 anomalías gravísimas tras realizar una auditoria a la Corporación Municipal de Valparaíso (Cormuval) tras el análisis de activos y pasivos. Además se encontró a adolescentes realizando trabajo remunerado.
Según detalla El Mercurio de Valparaíso, se detectó la mal utilización de 931 millones de pesos en subvenciones y los antecedentes fueron enviados al Servicio de Impuestos Internos (SII) para determinar las responsabilidades.
Contraloría además iniciará un juicio de cuentas en contra de Cormuval para que se restituyan los 931 millones de pesos "principalmente por el mal uso de subvenciones".
Entre esos malos usos de subvenciones se detectó el pago a los liceos María Luis Bombal y al Liceo Técnico de Valparaíso por más de 172 millones de pesos por la compra de buzos, poleras, corbatas, insignias, agendas, colaciones, empanadas, tortas, desayunos, almuerzos y servicios prestados que no están acreditados.
Trabajo adolescente
Durante la auditoría se detectó que alumnos del Liceo Técnico de Valparaíso y María Luisa Bombal "prestaron servicios de coctelería a la Cormuval y a privados con personal conformado, entre otros, por alumnos de los mismos establecimientos, quienes realizaron labores de garzón y cocinero a cambio de pagos que oscilaron entre los dos mil y 20 mil pesos".
Los estudiantes eran menores de esas y no se constató que aquellos contaran con la autorización correspondiente para prestar dichos trabajos.
Patricia Muñoz, defensora de la Niñez, afirmó que se trata de hechos de máxima gravedad. "Esperamos envío de dicha investigación para acciones adicionales", afirmó en su cuenta de Twitter.
Marcelo Garrido, secretario general de la Cormuval, afirmó que están revisando el documento de Contraloría y "nos parece un informe duro que demuestra que hay aspectos que claramente es necesario enfrentar y resolver con todas las consecuencias que eso signifique".
