Este jueves se entregó el presunto autor del homicidio de dos adolescentes que le habrían intentado cometer un portonazo en el centro de Santiago, Región Metropolitana.
Fue durante la madrugada de este miércoles que dos adolescentes, de 16 y 17 años, fueron encontrados muertos y con impactos balísticos en sus cuerpos en plena vía pública.
Imágenes de cámaras de seguridad mostraron cómo un vehículo llegaba a un edificio en el centro de Santiago y en cuyo interior iba un hombre de 23 años.
Detrás de él se detuvo otro vehículo, del cual bajaron tres sujetos y al menos uno de ellos portaba un arma de fuego.
Tras acercarse al conductor, éste le disparó a los sujetos al utilizar el arma de fuego que portaba, provocándole la muerte a dos de ellos.
Uno de los menores de edad, el de 16 años, tenía antecedentes policiales.
Durante este jueves, el presunto autor de los disparos se entregó en una sede de Carabineros de Chile.
De acuerdo a lo averiguado por T13, se trata de un hombre de 23 años con domicilio en Conchalí y que tenía antecedentes penales por receptación.
Éste habría concurrido hasta dependencias del OS9 de Carabineros para prestar declaración tras entregarse a las autoridades.
Lo anterior luego que su abogado manifestara que existía la intención de su representado de entregarse.
Abogado de conductor sostiene que él no portaba ninguna arma de fuego
El abogado Jean Duhalde, defensor del sujeto que se presentó ante la Justicia, afirmó que "pocas horas de acaecido el lamentable suceso yo me contacté con todas las autoridades del caso manifestando nuestra voluntad de presentarnos, porque no se entrega mi representado, se presenta, porque no está con orden de detención, a colaborar, a dar su versión de los hechos".
"Es mi representado una víctima más, en este país, de un portonazo. Solo que en este caso a los delincuentes les salió el tiro por la culata, porque mi representado (...) se pudo defender y terminó con la muerte de estos dos chicos que, lamentablemente, también en cierto modo son víctimas".
En otra línea, manifestó que "se cumple con todos y cada uno de los requisitos de la legítima defensa" en el actuar del conductor.
Sin embargo, indicó que "mi representado ha señalado que el arma que causó la muerte a estos dos jóvenes delincuentes fue la propia arma que ellos portaban y se puede apreciar en las grabaciones de las cámaras de seguridad del edificio a donde él llega, en compañía de su perrito, a ver a su pareja con quien vive, en el momento en que se ve rodeado por esta banda de jóvenes delincuentes se puede ver que con el primer individuo que lo aborda, que trata de bajarlo del auto, hay un forcejeo al interior del vehículo y se ve nítidamente que él sale disparado para atrás producto del disparo con la propia arma que portaba".
"Él no recuerda bien porque él estaba en una situación de shock, de adrenalina. No recuerda si le alcanzó a quitar el arma o con la misma mano del sujeto se produjeron los disparos", agregó, subrayando que "mi representado no portaba un arma".
Aunque no pudo afirmar que los jóvenes se habrían disparado a sí mismos. "Yo no puedo todavía sostener ninguna tesis a ese respecto tan categórica, pero producto del forcejeo se producen los disparos que finalmente le impactan a los propios delincuentes", indicó.
Igualmente, el abogado Jean Duhalde afirmó que tras registrarse el hecho, uno de los delincuentes que integraba la banda llegó hasta el lugar para retirar unas armas de fuego que quedaron en el sitio del suceso.
Por otra parte, reconoció que el Ministerio Público mantiene la tesis de que el conductor del auto portaba un arma personal y que con ella habría repelido el intento de "portonazo".
"Está siendo imputado por el delito de porte de arma, de un arma que no sabemos dónde está, qué arma es, de una arma que portaban los mismos sujetos que lo agredieron", insistió.