Una inversión de más de 56 mil millones de pesos (US$ 87 millones) implicará la construcción de nuevas instalaciones en el cruce fronterizo Los Libertadores, con el que se triplicará la capacidad de control del actual.
Si ahora es posible atender a cinco vehículos livianos a la vez, con las reformas se aumentará a 15; mientras que en el caso de los buses, pasará de dos a cuatro.
“Estamos invirtiendo para tener un espacio más eficiente de tránsito internacional, de manera de poder hacerle frente al enorme y positivo aumento de tráfico de vehículos entre ambos países", dijo la Presidenta Michelle Bachelet durante la ceremonia de colocación de la primera piedra en el paso internacional entre Chile y Argentina.
Entre las estadísticas presentadas por la mandataria para justificar las reformas, se mostró que durante enero el flujo crecio un 35% respecto al mismo mes del año pasado.
La nueva obra implica levantar un nuevo edificio de control migratorio que sustituirá al actual, existente desde 1975. El nuevo recinto tendrá una superficie útil de 32 mil metros cuadrados.
Su entrega está programada para 2019.
