Carlos Bellei, vocero del Instituto Nacional de Derechos Humanos, se trasladó durante la mañana de este viernes hacia las dependencias de la clínica psiquiátrica en la que se encuentra recluido Hernán Calderón Argandoña, acusado de parricidio frustrado tras haber apuñalado a su padre, el abogado Hernán Calderón.
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La defensa del joven acusó este jueves a Gendarmería de "tratos inhumanos", asegurando que permanece las 24 horas del día amarrado de pies y manos.
Si bien la institución militarizada negó los hechos, el vocero del INDH expresó que "concurrimos a esta clase de situaciones donde hay personas que estando bajo custodia del Estados denuncian algún tipo de situación que se aparta de los protocolos que deben cumplirse".
"Tenemos la obligación legal de concurrir", añadió Bellei.
Sin embargo, de acuerdo a su relato, el personero de la corporación declaró que "no fue posible hacer la observación directa por indicación del médico tratante".
El vocero achacó el "desconocimiento" sobre la labor del INDH por parte del profesional de la salud para haber impedido entrevistarse con Hernán Calderón, pero destacó que existe un recurso judicial en curso para facilitar el encuentro entre las partes.
"Lo importante es transmitir que como institución acogemos el llamado de cualquier persona, sea adulto mayor, una profesora o un uniformado", añadió Bellei.