El ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, dijo estar dispuesto a recibir ideas, pero pidió que sean “viables”, al ser consultado por los dichos del alcalde de La Florida, Rodolfo Carter, quien propuso crear una cárcel en una isla o un desierto para evitar que en nuestro país ocurra lo que sucedió en Ecuador.
“Uno puede recibir ideas. Lo que debemos lograr es que sean viables y en eso es lo que hemos estado trabajando conjuntamente con el Ministerio de Obras Públicas. (…) Lo que sí está claro es que necesitamos mayor disponibilidad penitenciaria, pero también necesitamos una racionalidad en el uso de la cárcel”, dijo el ministro Cordero.
Los dichos de Carter se produjeron cuando el alcalde de La Florida hablaba de la crisis de seguridad de Ecuador, donde uno de los líderes del narcotráfico del país se fugó de la cárcel y distintos recintos penitenciarios vivieron motines.
"Las dramáticas imágenes de Ecuador son un viaje al futuro, de lo que nos espera a los chilenos, si no hacemos cambios inmediatos para frenar ahora el avance desatado de la delincuencia y el narcotráfico. De lo contrario, no está lejos el tiempo en que viviremos ese mismo horror", aseguró Carter.
"Se acabó el tiempo para que el gobierno aplique medidas urgentes para frenar el avance de los delincuentes, porque estos infelices están restringiendo nuestra libertad y han logrado que los chilenos cambiemos nuestra forma de vida", agregó.
Al respecto, especificó que los recintos penales se podrían levantar en territorios difíciles de acceder, como en Aysén o en el desierto.
"Creación de una cárcel aislada, de alta seguridad para estos grupos, con régimen de visitas durísimos, tal como en Italia, un solo día podrán ser visitados", detalló.
Gobierno pide un análisis más profundo que solo la cárcel
El ministro de Justicia, en medio de la presentación de la licitación de un nuevo centro penitenciario en Talca, pidió no centrar el debate sólo en las cárceles y aseguró que Ecuador y Centroamérica han demostrado que “teniendo megacárceles sin segregación, permiten un reclutamiento más fácil de las bandas criminales”.
“Hay que tener cuidado con creer que simplemente con la construcción de una cárcel solucionamos el problema. Es uno de los aspectos vinculados al tema de seguridad, por lo que hay que observar el encadenamiento respectivo”, explicó.