En una casona de la comuna de Providencia, en la región Metropolitana, funcionó cerca de un año y medio el negocio de "Cursi Donuts", el cual fue clausurado por la Municipalidad.
Ubicado en un barrio patrimonial que nace en 1925, en la calle Keller, entre Miguel Claro y Manuel Montt, es una zona típica desde 1991. A raíz de esto, ninguna de sus casas puede ser intervenida sin autorización de consejo de monumentos.
"Nosotros llegamos a la casona en mayo de 2022, desconociendo que era zona típica, le hicimos las intervenciones que consideramos a lo que nosotros queríamos vender. Luego de que ya nos instalamos empezaron los problemas", detalló Martín Flores, dueño de Cursi Donuts.
En 2022 los dueños del local instalaron donas gigantes y pintaron de rosado las tejas y ventanas del recinto. Tras ser fiscalizados y multados por el municipio, recién a inicios de 2023 pidieron permiso al consejo, el cual fue rechazado por ser un inmueble patrimonial.
"Cursi Donuts modificó la fachada de un inmueble que se encuentra en zona típica de nuestra comuna, sin solicitar los permisos correspondientes al Consejo de Monumentos Nacionales", sostuvo Carol Vargas, de la Administración Municipal de Providencia.
Pasaron ocho meses y los dueños del local informaron que por falta de recursos no realizaron los cambios exigidos.