El médico Enrique Hess, jefe de Neurocirugía del Hospital Militar, se refirió al estado del subteniente Óscar Muñoz, quien fue baleado ayer en un enfrentamiento con delincuentes en Peñalolén.
Hess afirmó que en un caso como el del carabinero baleado, la principal preocupación es disminuir la presión que se genera en la cabeza producto del impacto del proyectil y, que en esa materia, las primeras 72 horas son clave.
En esa línea, Hess dijo que Muñoz se mantiene en riesgo vital, pero que ha sorteado las primeras 24 horas de manera exitosa.
A raíz de la preocupación por mantener la presión en la zona cerebral en un nivel normal, Hess dijo que por eso no se extrae el proyectil, el que se retira sólo en caso de que esté en una zona quirurgicamente alcanzable.
En el caso del subteniente Muñoz, el proyectil no se extrajo, situación que Hess dijo que éste "puede estar y en el futuro no implica riesgo".
