Lady Gaga, una de las cantantes que inició su fama por su extravagancia, hoy inauguró uno de los eventos más importantes de Estados Unidos, el Super Bowl 50.
En esta ocasión, Gaga no sorprendió por lo extraño de su show, sino por la pulcra interpretación que logró del himno nacional estadounidense.
Para entender un poco el contexto, alrededor de unos 114.4 millones de espectadores vieron el Super Bowl en 2015, cifra nunca antes vista en la historia del evento, con una cuota de mercado del 47,5%.
Lady Gaga compartió el escenario con la gandora del oscar, Marlee Matlin, quién realizó el lenguaje de señas.
La cantante generó mucha expectativa, debido a que no se sabía que se pondría. Pero Gaga no fue con algo atrevido, sino un traje completo de lentejuelas rojas.
Mira a continuación la presentación: