El día martes fue un día de anuncios en Argentina. Durante la jornada, el ministro de Economía, Luis Caputo, anunció las esperadas medidas económicas para enfrentar la crisis que atraviesa el país. Entre lo expuesto, se contempló la devaluación de un 54% del peso argentino, para hacer frente a la hiperinflación.
Así, esta mañana el dólar en el mercado oficial pasó a cotizar de 366 a 801 pesos argentinos, lo que dejó a la divisa trasandina con una devaluación del 54,24%.
Esto se suma a otras medidas como el fin de los Precios Justos, iniciativa impuesta por el gobierno de Alberto Fernández que restringía el alza de productos básicos para hacer frente al costo de la vida.
Durante mucho tiempo, esto impulsó el "turismo económico" de chilenos y uruguayos que viajaban al país trasandino para abastecerse de elementos como aceite, azúcar, detergente, entre otros.
Esta semana, supermercados y almacenes argentinos ya reflejaban un alza de hasta un 50% en diferentes productos.
¿Qué implica la devaluación del peso argentino?
Directamente, en términos de divisa, el peso chileno sigue siendo más fuerte que su par trasandino, eso implica que su impacto en la economía nacional no tenga mayores implicancias.
Según constata La Tercera, este panorama no es nuevo para Chile, ya que hace dos meses también ocurrió una fuerte devaluación de la moneda argentina.
Por lo pronto, esto no implica que existan variaciones o reducciones en el precio de los productos básicos, ya que esa medida era aplacada en gran parte por el sistema de los Precios Justos.