Un procurador ruso pidió el lunes dos años de cárcel contra un hombre acusado de haber criticado la ofensiva en Ucrania y a quien le quitaron la guardia de su hija por hacer un dibujo anti-guerra.
El caso de Alexei Moskaliov, de 54 años, causó una ola de indignación en Rusia y simboliza la amplitud de la represión contra personas que critican la ofensiva lanzada por el Kremlin contra Ucrania.
El lunes, un procurador de Efremov, pequeña ciudad situada a 300 km al sur de Moscú, pidió dos años de cárcel contra Moskaliov, quien es acusado de haber "desacreditado al ejército" indicó a AFP su abogado, Vladimir Bilienko.
Esta decisión es "dura", agregó el abogado, y dijo que el acusado se declaró "no culpable". La decisión del tribunal es esperada el martes.
El caso de Moskaliov es seguido de cerca en Rusia, donde el proceso ha causado indignación.
Los problemas comenzaron luego de que su hija Maria Moskaliova, de 13 años, hizo un dibujo en el colegio donde muestra misiles que se dirigen hacia una mujer y un niño con una bandera ucraniana.
En el contexto de persecución a las voces críticas de la ofensiva en Ucrania, la directora de la escuela alertó de inmediato a la policía.
En la investigación sobre el padre de la niña, las autoridades dicen que hallaron publicaciones en línea donde se critica la operación en Ucrania.
Moskaliov fue asignado a residencia y su hija colocada en una familia distinta y separada del padre.
El futuro de la familia se decidirá en otro proceso, que se inicia el 6 de abril, en el que Moskaliov puede ser definitivamente privado de la autoridad paterna.
Una petición ha sido lanzada para pedir el retorno de la niña a casa de su padre.
Inclusive el jefe del grupo paramilitar Wagner, Yevgueni Prigozhin, cuyos hombres combaten en Ucrania, ofreció su apoyo a Maria y criticó a las autoridades locales.
