La noticia se propagó casi como un virus por las redes sociales: la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó el miércoles (05.06.2024) que un hombre murió a causa de la gripe aviar AH5N2 en México, el primer caso conocido hasta ahora a nivel mundial.
No obstante, el Gobierno mexicano puso en duda este jueves el anuncio. El secretario de Salud, Jorge Alcocer, declaró que la víctima murió por otros motivos, que seguirán investigando el caso y que el comunicado de la OMS es "bastante malo".
El hombre mexicano, de 59 años, falleció el pasado 24 de abril. Se desconoce cómo se infectó, ya que no habría tenido contacto directo con aves de corral u otros animales. Sus familiares señalaron que padecía de otras enfermedades, como diabetes y problemas renales.
¿Qué tanto hay que preocuparse?
El informe del caso preocupó inmediatamente a los internautas, que recordaban al COVID-19 y hablaban de una posible nueva pandemia. Sin embargo, la OMS hizo un llamado a la calma, calificó el riesgo para la población como "bajo" y se descartaron más contagios.
"No existen razones para considerar que este caso implique una amenaza mayor", plantea a DW Augusto Valderrama Aguirre, profesor de Inmunología y Virología en el Departamento de Ciencias Biológicas de la Universidad de Los Andes, en Colombia.
"Lo importante aquí es que se ha documentado la posibilidad biológica de que humanos se infecten y, por tanto, habrá que tomar medidas preventivas. Una de estas puede ser incluir esta variante en las vacunas contra la influenza", propone.
Tampoco se trata de algo totalmente inesperado, ya que la gripe AH5N2 se encuentra en aves domésticas de México desde hace tiempo, cuenta a DW Alfredo García Sastre, profesor de Microbiología en la Escuela Icahn de Medicina de Mount Sinai, de Nueva York.
Este caso puntual "no es para alarmarse, pero es una alerta más para seguir estando preparados para una posible pandemia", agrega el virólogo español.
Un riesgo bajo para los humanos
En conversación con DW, la investigadora alemana Ursula Höfle concuerda con calificar el riesgo de contagio en humanos como bajo, ya que las personas suelen contagiarse por la exposición directa a las aves infectadas, una transmisión que de todas formas "no es fácil", asegura.
Sin embargo, la científica veterinaria del Instituto de Investigación en Recursos Cinegéticos (IREC) de la Universidad de Castilla-La Mancha advierte: "Aunque es un virus propiamente de las aves y tiene muchas dificultades para transmitirse a personas, es uno que puede cambiar muy rápido. Siempre hay un riesgo pequeño de que pueda adaptarse al ser humano, por eso estos virus se vigilan de cerca y se notifican" a la OMS.
"No hay que bajar la guardia, pero sin alarmarse", insiste la experta.
"Estar preparados" para una posible pandemia
Además de la influenza AH5N2, en las últimas décadas se ha detectado un preocupante aumento de la variante AH5N1, que ha causado la muerte de miles de aves migratorias, que propagan el virus por todo el planeta, infectando a otras especies y obligando a sacrificarlas.
En marzo de este año, la variante AH5N1 se detectó en las vacas lecheras de ocho estados en Estados Unidos, lo que demuestra la capacidad de adaptación de estos virus para traspasarse y sobrevivir: "Es bastante sorprendente. Hasta ahora, nunca se había detectado gripe en vacas. No se sabe muy bien por qué este virus ha sido capaz de encontrar la forma de infectar vacas", señala García Sastre.
Por eso, recalca, "los virus de la gripe son capaces de transformarse de un modo inesperado. Hasta ahora, hemos tenido suerte de que no se hayan transformado para dar lugar a una pandemia en humanos, pero hay que estar preparados para cuando esto ocurra".
¿Qué hacer para evitar contagios?
Los productos animales provenientes de países que han detectado el virus en su territorio podrían generar miedo a un posible contagio, pero los expertos consultados aseguran que el procesamiento de la mayor parte de los alimentos inactiva al virus.
"Todos los tratamientos que se dan a los alimentos cuando se cocinan eliminan al virus. Por ejemplo, al pasteurizar la leche o al cocinar la carne. Sería bueno evitar alimentos crudos o sin pasteurizar, pero todo aquello que está cocinado es totalmente seguro", afirma la investigadora Höfle.
De ocurrir un brote en algún país, la experta pide poner énfasis en la prevención y en la vacunación, especialmente para las personas vulnerables o que trabajan directamente con animales: "Evitar el contacto con aves infectadas, evitar recoger animales muertos que se encuentran en el campo o en el corral. Y si hay que hacerlo, usar guantes, mascarillas y reducir la exposición lo máximo posible".