Los científicos dicen que es "un escándalo": casi una tercera parte de las que se pensaba eran momias de animales egipcios están vacías.

Ahora, un proyecto de escaneo del Museo de Manchester y la Universidad de Manchester, en Reino Unido, reveló que muchas de las "momias" son bultos de tela vacíos en su interior.

Los investigadores creen que como en el antiguo Egipto había un apetito tan grande por estas ofrendas religiosas, la demanda pudo haber superado la oferta.

El proyecto de escaneo es el mayor de este tipo que nunca antes se haya llevado a cabo.

Hasta ahora, más de 800 animales momificados -desde gatos y aves hasta cocodrilos- han sido analizados utilizando radiografías de rayos X y escáneres de tomografía computarizada (TC).

Rellenos alternativos

Una tercera parte de las momias escaneadas contienen animales completos que, según los investigadores, están extraordinariamente bien conservados.

Otra contiene solo partes de animales. Y la otra tercera parte, aseguran, están vacías.

Siempre supimos que no todas las momias de animales contenían lo que se esperaba, pero descubrimos que cerca de un tercio no contiene ningún elemento animal
Lidija McKnight, egiptóloga. 

"Ha habido algunas sorpresas", afirmó Lidija McKnight, egiptóloga de la Universidad de Manchester.

"Siempre supimos que no todas las momias de animales contenían lo que se esperaba, pero descubrimos que cerca de un tercio no contiene ningún elemento animal".

En cambio, explicó, los trapos están rellenos de otras cosas.

"Básicamente material orgánico como barro, palos y juncos, que habrían estado desperdigados en los talleres de los embalsamadores, y también cosas como cáscara huevo y plumas que están asociadas a los animales".

Ofrendas

A diferencia de las momias humanas, creadas para preservar el cuerpo del difunto para la vida en el más allá, las momias animales eran ofrendas religiosas.

"Sabemos que los egipcios adoraban dioses de formas animales y estas momias les permitían establecer una conexión con el mundo divino", le explicó a la BBC Campbell Price, curador de Egipto y Sudán del Museo de Manchester.

"Los animales eran ofrendas votivas". El equivalente hoy día sería dejar una vela en una catedral, pero en tiempos egipcios la ofrenda consistía en una animal momificado. 

Sabemos que los egipcios adoraban dioses de formas animales y estas momias les permitían establecer una conexión con el mundo divino
Campbell Price, curador de Egipto.

"Uno iría a un sitio especial donde compraría una momia animal mediante un sistema de trueque. Luego se la daría a un sacerdote que reuniría un grupo de momias animales y las enterraría", añade el experto.

Las excavaciones revelaron que la demanda de estos objetos sagrados era elevada.

En Egipto se han descubierto cerca de 30 catacumbas enormes con millones de momias que llegan hasta el techo.

Cada tumba está dedicada a una criatura en particular: perros, gatos, cocodrilos, ibis y monos.

Escala industrial

Se estima que los egipcios momificaron a unos 70 millones de animales.

"La escala de la momificación animal entre el año 800 a.C y el período romano es enorme", señala Price.

"Mataban a los animales cuando eran jóvenes y bastante pequeños. Para alcanzar estas cifras tendrían que haber contado con un programa muy específico de reproducción".

Nosotros no pensamos que se trate de una falsificación, sino que usaban todo lo que podían encontrar. Y, muchas veces, las momias de envoltorios más bellos no contienen restos de los animales
Lidija McKnight, egiptóloga.

No obstante, los investigadores creen que los embalsamadores tenían dificultades para suplir la demanda.

Pero no piensan que las momias vacías hayan sido un engaño. Creen que los egipcios sabían que no estaban enterrando una criatura completa, sino materiales asociados a los animales durante su vida, como restos de sus nidos o de sus huevos.

"(Estos materiales) eran especiales por su proximidad con los animales, aunque no fuesen los animales mismos", dice McKnight.

"Nosotros no pensamos que se trate de una falsificación, sino que usaban todo lo que podían encontrar. Y, muchas veces, las momias de envoltorios más bellos no contienen restos de los animales".

 

 

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