El caso conmocionó a Argentina en junio de 2017 y este martes, en mayo de 2018, llegó a su fin.
La justicia trasandina condenó a presidio perpetuo al periodista Franco Rodrigo Gaspar Cinco, quien fue declarado culpable del delito de "homicidio simple en grado de tentativa en concurso real con homicidio doblemente calificado por la relación de pareja y por el medio utilizado".
El comunicador envenenó a su pareja Alejandra Párraga y a su pequeño hijo Amir, de dos años.
Según explica el sitio argentino Crónica, el condenado le acercó la bebida al bebé que estaba enfermo, diciéndole a su novia que era "agua bendita".
Sin embargo, el brebaje tenía cianuro lo que ocasionó que niño convulsionara y muriera al instante. Su madre, en la desesperación, le hizo respiración boca a boca y en contacto con el veneno, también colapsó, agregó el medio.
La parte querellante apuntó a que el Gaspar Cinco quería matar al niño que su novia había tenido con su pareja anterior.
"Finalmente se hizo justicia (...) Más allá de que este asesino quiso culpar a mi hija, diciendo que fue mi hija cuando las pruebas decían lo contrario. Ahora nos juntaremos en familia y lloraremos porque el dolor que llevamos es inmenso", dijo el padre y abuelo de las víctimas, Alejandro Párraga.
