La Alta Comisionada de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Michelle Bachelet, condenó fuertemente las ejecuciones de 37 personas condenadas a pena de muerte por "comportamientos terroristas" en Arabia Saudita, y denunció que al menos tres de los condenados eran menores.
"Condeno firmemente estas ejecuciones masivas espantosas [...], a pesar de las preocupaciones expresadas a raíz de las mismas por numerosos relatores especiales de la ONU, por el Comité de la ONU para los Derechos del Niño y otros", lamentó la Alta Comisionada.
A través de un comunicado, la comisión de Derechos Humanos de la ONU, denunció que era "odioso" que al menos tres de los ejecutados fueran menores en el momento de su proceso. "Insto urgentemente al gobierno saudita a revisar inmediatamente su ley antiterrorista [...] para prohibir la pena capital para menores", afirmó.
Las ejecuciones que se llevaron a cabo el pasado martes, tuvieron lugar en cinco regiones: la capital Riad, las ciudades santas de La Meca y Medina, la región sunita de Al Qasim y la Provincia Oriental donde se concentra la minoría chiíta, según una declaración oficial del ministerio del Interior.
De acuerdo con Amnistía Internacional, el reino, que sigue una interpretación rigorista de la ley islámica, figura entre los países que aplican en mayor número la pena capital.
Con estas ejecuciones, ya son más de 100 las personas ajusticiadas en Arabia Saudita en lo que va de año, según un recuento establecido a partir de comunicados oficiales.
Según Amnistía Internacional, el 2018 Arabia Saudita ejecutó a 149 personas, siendo el tercer mayor país ejecutor en el mundo. El 78% de las ejecuciones conocidas el 2018, tuvieron lugar en solo cuatro países: Arabia Saudita, Saudí, Irán e Irak.