Como "exitosa” fue calificada este domingo la operación a la que fue sometido el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro. El procedimiento, el cuarto desde que el mandatario fuera acuchillado cuando participaba en un mitin electoral en septiembre de 2018, en plena campaña para las presidenciales, duró poco más de cinco horas, casi el doble de lo previsto inicialmente.

La nueva intervención corrigió una hernia de incisión de 7 centímetros de diámetro que le surgió en el abdomen por el debilitamiento muscular provocado por las anteriores operaciones. "El paciente, que presenta estado clínico estable, hará la recuperación en la habitación. Por orientación médica, las visitas serán restringidas por el momento”, informó el Hospital Vila Nova Star de la ciudad de Sao Paulo.

Bolsonaro deberá permanecer cinco días, al menos, en el recinto médico. El portavoz de la Presidencia brasileña, Otavio do Rego Barro, afirmó en una rueda de prensa que el mandatario transmitió el cargo a su vicepresidente, el general de la reserva Hamilton Mourao, inicialmente hasta el jueves y que volverá a asumirlo cuando los médicos lo recomienden.

Será evaluado a diario

"Por norma legal, el presidente le transmitió el poder al vicepresidente. La previsión es que éste lo ejerza interinamente por cinco días a partir del domingo. Los cinco días son un plazo técnico y no el de recuperación. Después de ese período se evaluará (si Bolsonaro retoma sus funciones), pero la decisión es técnica (de los médicos)”, dijo el portavoz presidencial.

La operación, realizada en una clínica particular en el acomodado barrio de Itaim, fue encabezada por el cirujano jefe Antonio Macedo. Éste insistió en que, pese a la demora, no hubo complicaciones. "Podemos prever dos horas y demorar cuatro. Eso es normal. Lo importante es no correr y que todo quede bien hecho. Normalmente una cirugía de corrección de hernia no dura tanto, pero no esperábamos que estuviera tan adherida al tejido abdominal”, aclaró.

Macedo aseguró que Bolsonaro será evaluado diariamente por los médicos y que por ahora no se prevé la necesidad de nuevos exámenes de imagen.

Publicidad