Qué observar. Todo apunta a que Boric realizará entre las 11:00 y el mediodía de este viernes el segundo cambio de gabinete de su administración, que este sábado cumple un año y estará marcado por un encuentro del Presidente con su nuevo equipo ministerial.
- El Mandatario llega fortalecido al ajuste, al recuperar en febrero -a partir del despliegue ante ola de incendios en el sur- la inédita caída en su popularidad desde que llegó a La Moneda. En los últimos días ha dicho que pondrá el foco en la gestión en su nuevo equipo de ministros. Se trata de una idea que venía masticando desde fines de 2022, a partir de los traumáticos errores que enfrentó por la entrega de indultos a presos del 18-O y en la elección del Fiscal Nacional, manejados por dos cercanos de él (Marcela Ríos y Matías Meza-Lopehandía).
- El cambio de los subsecretarios, donde Apruebo Dignidad mantiene hasta hoy la hegemonía, se anunciará a través de un comunicado.
- Boric llegó la noche de este jueves desde su gira por Tarapacá con un grupo de ministros que permenecerán en sus cargos, como Carlos Montes y Jeanette Jara, y el subsecretario de Desarrollo Regional Nicolás Cataldo, un PC que bien podría saltar a la primera línea al revés de otro subsecretario de su partido, como Galo Eidelstein, quien en las FFAA ha protagonizado varias controversias.
Hacia dónde apunta Boric. En teoría, el Presidente dejó el control político de su administración en manos de la centroizquierda después del plebiscito del 4S, cuando Carolina Tohá llegó a Interior y Ana Lya Uriarte a la Secretaría General de la Presidencia.
- En la víspera del segundo cambio de gabinete de gobierno en menos un año, Tohá entregó un mensaje sobre lo que viene en el tercer tiempo. “Es el momento de actualizar la promesa de este gobierno ante el pueblo de Chile y actualizar la alianza de gobierno que lo respalda”, dijo a El Mercurio a fines de febrero.
- Los incendios en el sur cambiaron la agenda en el verano, luego de la profunda crisis que se detonó a partir del indulto presidencial a 12 presos del 18-O y un ex FPMR condenado por asaltar un banco.
- Para entonces se instaló en La Moneda y los partidos oficialistas la posibilidad de realizar un profundo cambio al equipo de ministros y autoridades de segunda y tercera línea, como subsecretarios y secretarios regionales ministeriales, pero la atención se concentró en la emergencia y el desenlace del quiebre en el Socialismo Democrático, que competirá dividido en las elecciones de constituyentes del 7 de mayo a contrapelo de lo que pidió Boric (que igualmente logró que el PS se aliara con el FA-PC, lo que supuso que el Socialismo Democrático y Apruebo Dignidad no se pesaran en las urnas y que un triunfo de la centroizquierda presionara por un cambio de agenda).
- Hoy, en medio de la presión del PS por realizar el cambio antes del 11 de marzo, lo que supone instalar al partido en el centro de la estructura de gobierno, la cirugía del gabinete está en sus horas regresivas. Y todo apunta a que, siguiendo la señal de Tohá, los ajustes otorguen un fuerte espacio a la centroizquierda, con experiencia en el manejo de la gestión del Estado.
- La discusión del PS, sin embargo, trasciende por lejos a un cambio de gabinete.
- El mensaje que han hecho llegar los socialistas a La Moneda está enfocado en romper con un modelo de gobierno que instaló Boric desde la derrota del 4-S. Vale decir, que la primera línea del poder, en este caso el gabinete, esté bajo el control de la centroizquierda y que la segunda y tercera línea, como subsecretarios y jefes de servicios, quede bajo el control de Apruebo Dignidad.
- En clave política, la máquina territorial sigue bajo el dominio de Apruebo Dignidad. Se trata de un factor clave en las elecciones que vienen y que se relaciona con la disputa por la hegemonía de izquierda, que sigue estando sobre la mesa.
Los ministras desconocidos (y las que saldrían del gabinete). De los 24 ministros medidos por Cadem la primera semana de marzo, solo 6 tienen un conocimiento por sobre el 50% y 13 están por debajo del 30%, un índice muy bajo para cualquier administración que apuesta a controlar la agenda, perfilar su programa y no sobreexponer al Presidente. En el caso de algunos de ellos la población sabe menos quiénes son desde que llegaron al gabinete. Cadem no mide su evaluación, dado su bajo nivel de conocimiento. A continuación algunos casos.
- Alexandra Benado, ministra de Deportes. El 25% la conocía el 11 de marzo de 2o22. En febrero era de 21%. Aparece como una de las candidatas a salir del gabinete.
- Julieta Brodsky, ministra de las Culturas. Llegó con el 18% y hoy tiene 24%. Aparece como una de las candidatas a salir del gabinete.
Otros ministros con bajo conocimiento, algunos de los cuales pueden abandonar el gabinete, son:
- Esteban Valenzuela. Entró con 24%. Hoy tiene el 33%.
- Silvia Díaz, ministra de Ciencia: En septiembre, cuando fue designada, la conocía el 27%. Hoy, el 16%
- Maisa Rojas, ministra de Medio Ambiente: El 27% la conocía en marzo de 2022. Once meses después anota 30%.
- Javiera Toro, ministra de Bienes Nacionales: El 20% sabía quién era al ser designada. Hoy es de 24%.
- Juan Carlos García, ministro de OOPP: Llegó con el 20% de conocimiento y está con el 27%.
- Marcela Hernando, ministra de Minería. Ha avanzado del 22% al 24% entre quienes saben quién es.
- Diego Pardow, ministro de Energía. El ex asesor del segundo piso fue designado en el cambio de gabinete de septiembre. El 29% sabía quién era para entonces. Hoy el 21%.
El caso de Urrejola y Ávila (y el desfonde del FA-PC). El ministro peor peor evaluado, de acuerdo a Cadem, es Giorgio Jackson (Revolución Democrática). Su caso es simbólico. Desde marzo de 2022 ha caído 18 puntos y hoy es el peor evaluado del gabinete, pese a que salió del comité político a Desarrollo Social, un ministerio menos expuesto. Su descenso se profundizó tras la derrota del Apruebo, por la cual se jugó. Entre los cuatro ministros peor evaluados están:
- Antonia Urrejola. La Canciller es cercana al PS y su gestión marcada por críticas de sus antecesores a partir de una serie de bochornos diplomáticos. Su salida es un hecho, al igual como lo sería la del subsecretario de Relaciones Exteriores, José Miguel Ahumada.
- Marco Antonio Ávila. La percepción positiva del ministro de Educación cayó del 72% que anotaba en marzo de 2022 al 53%. La tarde del martes sostuvo un rudo intercambio verbal con la diputada Viviana Delgado, quien terminó en la enfermería del Congreso descompensada por un problema de presión. Ávila se disculpó, pero 3 diputadas (incluida Delgado) abandonaron la sala mientras se votaba la reforma tributaria en protesta por el altercado. El proyecto terminó cayéndose. Militante de RD, el profesor debutó en marzo como el ministro mejor evaluado del gabinete. El incidente ocurre en medio de cuestionamientos a su gestión.
Otros ministros del FA-PC se han desfondado con el paso de los meses, como Jackson y Nicolás Grau, quienes acompañaron a Boric a su reciente gira por la región de Tarapacá.
- Nicolás Grau. El ministro de Economía se vió especialmente alegre en la gira de Boric. En marzo de 2022, el 61% lo evaluaba positivamente. En un año cayó 13 puntos. Grau milita en Convergencia Social, el partido de Boric. Ambos tienen una amistad de años.
- Antonia Orellana. La ministra de la Mujer, militante de Convergencia Social, no fue evaluada en marzo por Cadem, al tener menos del 40% de conocimiento. Una encuesta de Data Influye de esta semana la mostró en el último lugar de la tabla. El que Orellana, la única secretaria de Estado del FA en el comité político, aparezca en el último lugar no pasó inadvertido. Buena parte de sus antecesoras en el Ministerio de la Mujer, como Claudia Pascual (PC) en el gobierno de Bachelet y Carolina Schmidt en el de Piñera, siempre estuvieron en los primeros lugares.
El Socialismo Democrático. La encuesta Cadem ratificó que los ministros del Socialismo Democrático tiene una evaluación muy por sobre la de sus pares del FA-PC. Marcel, Montes, Tohá, Uriarte y Maya Fernández están por sobre el 50% de aprobación.
- Esta semana, sin embargo, el Socialismo Democrático tuvo problemamente su peor revés tras la derrota de los ministros Marcel y Uriarte, a partir del rechazo de la reforma tributaria en la Cámara de Diputados. El episodio no pasó inadvertido en Apruebo Dignidad.
- El cambio de gabinete, de todas formas, se hará en la fecha que pedía el PS: antes del 11 de marzo. En el trasfondo de esa determinación socialista existían varios factores en juego. El más visible, para algunos, tenía que ver con expandir los espacios del socialismo cuán pronto sea posible (y no esperar al PPD).