En medio de la semana en que estuvo más ardua la disputa entre Joaquín Lavín y Evelyn Matthei, el líder del Partido Republicano, José Antonio Kast, envió una primera señal en favor de la alcaldesa.
“Evelyn Matthei ha sido una gran alcaldesa y el año 2013 asumió con valentía una difícil candidatura. Lamento los intentos de sacarla por secretaría y no reconocer, más allá de las diferencia, el liderazgo, convicciones y fuerza que tiene su eventual postulación presidencial”, escribió Kast el pasado jueves en su cuenta de Twitter.
El exdiputado dejó ese mensaje desde la Región de Aysén, donde estuvo la semana pasada para recolectar firmas para la formación de su colectividad.
Pero eso no fue todo. Este martes, en Tele13 Radio, Kast fue un paso más allá y se involucró en el dilema que por estos días enfrenta la UDI, su expartido.
“Sería un error que excluyeran a Evelyn Matthei de las primarias, porque hay un sector importante de la derecha chilena que quiere una voz más firme, una voz que sea más clara en ciertos temas. Ella, en temas de seguridad, en temas económicos ha tenido una voz distinta a otros de los candidatos, sobre todo se ve la diferencia entre Lavín y Evelyn Matthei”, señaló.
Al ser consultado sobre la visión electoral de que a los Republicanos no les convendría que Matthei llegue a primaria vuelta, por apuntar a una derecha “tradicional”, Kast respondió: “Me gustaría que en la primaria pudiera estar Evelyn Matthei y ganar Evelyn Matthei porque me acomoda mucho más llegar a una elección en primera vuelta presidencial con alguien como Evelyn Matthei, con quien tengo algunos mínimos comunes más claros frente a la izquierda”.
¿Cuál es entonces el análisis que hacen al interior del Partido Republicano sobre los dichos de su líder?
“Cero costos”
Evelyn Matthei y José Antonio Kast tienen historia, “se llevan bien”, recalcan sus cercanos. En 2010, la entonces senadora apoyó y conformó la lista que lideraba Kast para llegar a la presidencia de la UDI y que competía contra la reelección de Juan Antonio Coloma. Allí, Matthei destacó que se necesitaba un nuevo aire en el partido, porque, dijo, la colectividad había “involucionado” a cargo de Coloma. “Siento que Kast en estos dos años ha tenido una maduración súper interesante. Siento, además, que la apuesta de él es una apuesta de largo plazo. No es una cosa de una vez, o una aventura”, dijo entonces Matthei y recalcó que era bueno que una “liberal” y una “vieja” se incluyera en su lista para no dar la impresión de que esta era una pelea generacional.
Años antes, recuerdan sus cercanos, en 2008, cuando había que definir un apoyo presidencial a Sebastián Piñera, ya empezaron a tener una relación más cercana, pese a que Matthei era reconocida “liberal” y Kast “conservador”.
En 2013, en tanto, remarcan que Kast hizo harta campaña por Matthei para la compleja elección que enfrentaba contra Michelle Bachelet. “También ha habido altos y bajos”, comentan al recordar que, en 2018, Matthei fue crítica de la postura opositora que tomó Kast hacia el gobierno de Piñera. Sin embargo, en diciembre de 2019, cuando Matthei por primera vez se mostró abierta a ser candidata por la molestia que le generó la definición de Lavín como “socialdemócrata”, el Partido Republicano inmediatamente dijo públicamente que le acomodaba competir con Matthei.
Por estos días, en tanto, como el mismo Kast precisó este martes, en el Partido Republicano relevan que Matthei sea la única candidata presidencial de Chile Vamos que se ha mantenido como una opción clara de derecha. “La única que no hizo campaña por el Apruebo”, sostienen.
¿Por qué salir dándole este espaldarazo? En el Partido Republicano afirman que, como hay altas posibilidades de que Matthei quede fuera de la primaria, hay “cero costos” al entregarle apoyo en este momento. Es más: apenas la UDI la deje afuera, dicen, Kast podría incluso aumentar su evaluación en encuestas, porque habrá un grupo que se sentirá sin representación en esa contienda presidencial del próximo 18 de julio. Pero otros son más tajantes y dicen que, con Matthei en las encuestas, los puntos de adhesión de Kast no han variado demasiado.
“Si excluyen a Evelyn Matthei, van a excluir a un sector importante que se va a restar de ir a votar porque no se va a sentir identificado”, dijo Kast este martes.
“Una parte de los votos se van a ir donde José Antonio Kast, que va a estar esperando feliz llevárselos para su candidatura”, dice a T13, por su parte, el analista electoral y director de tuinfluyes.com, Axel Callís. Y agrega: “Toda la oferta que tiene Chile Vamos es más corrida hacia el centro. (…) Por tanto, se pierde toda la versión más dura de derecha y eso lo va a recibir feliz José Antonio Kast, o sea, ahí va a tener cuatro puntos regalados por parte de Chile Vamos”.
Ahora bien, en el Partido Republicano insisten en que para la UDI los resultados de la elección de este sábado y domingo serán clave. La colectividad, en ese sentido, compite con Gonzalo de la Carrera en Las Condes contra la candidata de Lavín, Daniela Peñaloza, y la expectación es alta. “Si a Peñaloza no la va bien, no es tan claro que bajen a Matthei”, precisan.
En el Partido Republicano, asimismo, desmenuzan por qué les acomoda competir con Matthei: es un “frente común hacia la izquierda”, recalcan, tal como dijo Kast este martes. Explican que sus ideas, al ser debatidas en una primaria de Chile Vamos, provoca un efecto de “contagio” al resto de la derecha para instalar un discurso de derecha.
Y no solo contagia las ideas, dicen, sino que también puede atraer a ese electorado liberal de derecha que no va a adherir a Kast directamente, pero sí pueden encontrar puntos comunes como en el llamado antipopulismo o bien con la idea de un “Estado eficiente”.
¿Qué tanto les complica el perfil liberal de Matthei? Dicen que casi nada, pues la alcaldesa no tiene una agenda valórica; solo dice su opinión cuando se la piden. “No se toma las banderas de la izquierda”, agregan.
El fantasma de la segunda vuelta
El liderazgo de José Antonio Kast en la elección presidencial de 2021 será muy distinto al de 2017, cuando era candidato independiente. Esta vez, si llega a ser candidato presidencial lo hará, según esperan, con un partido inscrito a nivel nacional, y probablemente, de acuerdo a sondeos, con concejales y constituyentes electos en su partido.
Eso, sin duda influirá en la eventual negociación con Chile Vamos tanto para una eventual segunda vuelta.
“En segunda vuelta nosotros no tendríamos ningún problema en apoyar a Matthei, si ella pasara a segunda vuelta, la apoyaríamos feliz de la vida, en cambio apoyar a Lavín en una segunda vuelta nos da un poco de asco, para qué decirlo de otra manera. No estamos dispuesto a apoyar el mal menor otra vez; no hay una segunda vez”, comenta a T13.CL el diputado republicano Ignacio Urrutia.
Los dichos del parlamentario dan cuenta de un sentir en el partido: los votos de Evelyn sí son traspasables, no así los de Lavín. Y el hostigamiento de seguir votando por el “mal menor”, dicen, esta vez sí puede pesar.
En 2017, Kast le entregó su apoyo inmediato al entonces candidato Sebastián Piñera, pero la relación con el gobierno ha sido compleja. Esa misma colectividad se declaró una vez como opositora a la administración Piñera y han acusado falta de carácter y de liderazgo.
Es decir, esta vez, su precio de apoyo en una segunda vuelta a Chile Vamos sería más alto. El propio Kast señaló que con Matthei tiene muchos más “mínimos comunes” y volvió a criticar al alcalde de Las Condes. “Él (Lavín) tiene una mirada política distinta a la mía y espero que la vaya cambiando, pero si él llegara a la primera vuelta, yo esperaría que empezara a variar un poco su discurso y volviera a sus orígenes”, aseguró, lanzando una advertencia.
Al interior del Partido Republicano no solo ven que Matthei causa simpatía en su partido sino también en el mundo liberal o incluso en votantes de Lavín, lo que, añaden, sin duda atrae a la colectividad, pues, de todas maneras, sería más fácil negociar con un liderazgo que abarque a las distintas sensibilidades en la derecha, pero que se mantiene “en una sola línea”.