El directorio de Cadem publicó este martes una carta en El Mercurio, en la que se refirió a los dichos del convencional Daniel Stingo, quien criticó los resultados de la última publicación de la encuesta que posicionaba a José Antonio Kast como primera preferencia en octubre, previo a las elecciones del pasado 21 de noviembre.
En su momento, Stingo declaró: "Les falta decencia en el vivir, pero no solamente a ustedes de la Cadem, que son indecentes, porque la verdad es que no es real, están mintiendo, están inventando, están tergiversando porque no hacen un análisis mínimo de los resultados que les salieron, si es que les salieron".
Pero, tras el triunfo de Kast el pasado domingo, distintos seguidores del líder del Partido Republicano recordaron las declaraciones del abogado y constituyente.
Frente a esto, desde Cadem acusaron a Stingo de injuriar a la gerenta general de la entidad, Karen Thal, y al gerente de asuntos públicos y estudios cualitativos, Roberto Izikson.
"Cadem fue la que tuvo la mayor capacidad de anticipar los resultados de esta elección, tanto en porcentaje, como en orden de llegada", precisaron, agregando que "la realidad habló".
Y añadieron: "Nos preguntamos qué pretendía el convencional al hacer esa declaración. Al parecer, hubiera preferido que manipuláramos los resultados de nuestras encuestas".
En ese contexto, los directores de Cadem señalaron estar convencidos de que los estudios tienen "un rol clave en una democracia, para que los ciudadanos voten de la manera más informada posible".
"El constituyente, en cambio, habría preferido que no las difundiéramos", criticaron en la carta.
Finalmente, lamentaron los "ataques infundados, los que llevados incluso al ámbito personal, son totalmente inaceptables en un Chile democrático".
"Confiamos en una sana reflexión del constituyente y las pertinentes disculpas públicas al menos utilizando el mismo medio y tiempo dedicado a insultar", terminan precisando en la misiva, la cual estaba firmada por Matías Claro, Ricardo Solari, Manuel Jorquera, Gabriel Calgaro y Ricardo Misraji.
