Este domingo se disputó la última prueba de la Fórmula E en la segunda clasificación del E-Prix de Londres. El neozelandés Nick Cassidy celebró tras quedarse con la pole y llevó a su escudería, Envision Racing, al triunfo en dicha categoría.
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La carrera estuvo marcada por las condiciones climáticas que retrasaron una hora y media el evento. Las lluvias azotaron la capital inglesa y muchos pensaron que no se disputaría.
Después de una prolongada espera, la carrera finalmente se reanudó en el London Excel. Cassidy, que partía desde la pole, logró arrebatarla 'in extremis' a Evans, quien buscaba el doblete tras su triunfo del sábado. Las primeras vueltas estuvieron marcadas por la precaución y algunos sustos, lo que llevó a los pilotos a mostrarse cautelosos al atacar a sus rivales.
A medida que avanzaban las vueltas, Cassidy comenzó a dominar la carrera con su vertiginoso ritmo. Solo Evans representaba una lejana amenaza en su retrovisor, ya que el líder de Envision Racing ganaba décima tras décima en cada curva. La brecha entre Cassidy y sus perseguidores se disparaba hasta casi diez segundos, siendo Jake Dennis, el actual campeón, quien ocupaba el tercer puesto.
Bajo el trazado londinense, Cassidy se mostró imbatible, sin que nadie pudiera hacerle sombra. Su victoria le sirvió para redimirse después de la mala suerte del sábado, cuando un toque con su compañero de equipo, Buemi, le privó de luchar por la victoria en el Mundial.
Tras perder la pole con Dennis, Nick Cassidy canalizó su rabia y se esforzó al máximo para conseguir una nueva victoria en esta temporada, su tercera del 2023. Un merecido adiós para él. En el podio, estuvo acompañado por Evans y Dennis, dos rivales que se rindieron ante el poderío del piloto neozelandés.
