Tras casi una año al borde de la muerte, el piloto de la Fórmula Uno, Jules Bianchi, no pudo superar las serias lesiones sufridas producto de su accidente en el Gran Premio de Japón, y falleció esta noche en el Hospital de Niza, en Francia.

La familia del deportista confirmó la noticia a través de un comunicado en Twitter, donde expresaron: "Jules luchó hasta el final, como siempre, pero hoy su batalla llegó a su fin. El dolor que sentimos es inmenso e indescriptible. Queremos dar las gracias al personal médico en el Hospital de Niza que cuidó de él con amor y dedicación".

El deceso de Bianchi marca un hito importante; esto porque sería el primer piloto de la F1 en fallecer debido a un accidente de carrera. El último registro correspondía a Ayrton Senna, quien murió el 1 de mayo de 1994, en Italia.

"Estamos devastados por la pérdida de Jules después de una lucha tan dura", dijo su escudería Manor F1 Team en la red social Twitter. "Fue un privilegio que compitiera en nuestro equipo", agregó.

El francés sufrió graves heridas en la cabeza cuando, en condiciones húmedas y de poca luz, su coche Marussia chocó contra un tractor que intentaba retirar el Sauber de Adrian Sutil.

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