No es un juego en el que se busque la lucha cuerpo contra cuerpo, sino un toque de balón sutil, un cambio de frente o una proyección al espacio.
También hay que anotar goles, pero la idea principal de la primera liga de fútbol para obesos del mundo es perder peso.
Se trata de Fatball, un torneo que arrancó esta semana en el centro de Inglaterra en el que sólo pueden participar jugadores con un Índice de Masa Corporal por arriba de 30, que según la Organización Mundial de la Salud es el nivel desde el cual se comienza a considerar a una persona obesa.
La liga se extenderá durante 14 semanas y los equipos sumarán puntos de la manera convencional, con victorias o empates, y también si sus jugadores van perdiendo peso a medida que avanzan los partidos.
La mayoría de participantes coinciden en que se cansaron de asistir a programas diseñados para las mujeres.
El organizador del torneo es Andrew Shanahan, de 37 años, que hace dos años fundó MANvFAT, algo como "el hombre contra la gordura", una iniciativa dirigida a incentivar a los hombres a mantenerse activa físicamente.
"En 2013 pesaba 105 kilogramos y ahora estoy alrededor de 77, pero lo que más me sorprendió es el poco apoyo que tienen los hombres para perder peso", le dijo Shanahan al periódico británico The Daily Mail.
Tengo un bebé de siete meses y lo que quiero es sacar a mi niño al parque y poder jugar con él
"No había ninguna ayuda para mí y todas las clases estaban diseñadas para las necesidades de las mujeres", se quejó Shanahan, quien ahora es muy "flaco" para poder jugar en la liga que creó.
Y en eso coincide uno de los participantes del Fatball, Andy Allsop, de 146 kilogramos, quien explicó a la BBC que su lucha para reducir de peso ha sido como escalar el Everest.
"El punto es que todos estamos en el mismo barco. Todos tenemos problemas con nuestro peso, hemos hechos diferentes tratamientos, vamos, pagamos dinero, hablamos de lo que pesamos y decimos que la semana que viene trataremos de hacerlo mejor".
Allsop considera que los programas para perder peso se enfocan mucho en terapias y conversaciones, pero que él prefiere "salir a jugar fútbol".
"Aquí te pesas solo, vas a un campo de fútbol y juegas. No hablas de tu peso, eso es algo que es evidente. Todos nos esforzamos al máximo y es uno de esos lugares en los que te puedes sentir parte".
"Yo solía jugar fútbol a nivel semiprofesional cuando era joven, pero luego fui a la universidad y de repente aumenté 30 kilos", cuenta Allsop.
"Tengo un bebé de siete meses y lo que quiero es sacar a mi niño al parque y poder jugar con él. Es momento que yo haga algo para lograr eso y este programa es exactamente lo que estaba necesitando".
La ilustración es la del portero del Sheffield, Bill "El Gordo" Foulke, durante la final de la final de copa contra el Southampton en 1902. Eran otras épocas.
Son ocho los equipos que conforman el primer campeonato, todos con nombres en los que hacen juegos de palabras con el inglés y que en algunos casos hace referencia a barrigas cerveceras, a pasteles, a las tallas de ropa o simplemente a la falta de cuerpos atléticos.
Es así que el primer líder del torneo es el Midlands Untied, seguido por Phoenix X(XX)L, Beer Bellies United y Dyslexic Untied.
En la parte baja quedaron Inter-Pies, West Midlands Non Athletics, FC Egco y XL Legends.
La buena noticia para los 90 jugadores que formaron parte de la primera fechade partidos es que si logran bajar de peso y reducir su IMC a menos de 30, igual podrán seguir jugando hasta el final del torneo.