Este sábado, el Hoffenheim recibió al Bayer Munich en un encuentro válido por la jornada 24 de la Bundesliga y que no estuvo marcado por la abultada victoria de los visitantes, sino que por el comportamiento de los hinchas visitantes que insultaron al dueño del club local, Dietmar Hopp.
Ésto determinó que ambos equipos terminaran el partido entre pases y conversaciones.
En esta línea, lo que desató el final del partido fue un lienzo que mostraron los hinchas del Bayer Munich en contra del dueño del Hoffenheim y que decía: "que lo sepa todo el mundo, Hopp rompe su palabra, ¡hijo de puta!".
Por esta razón, los jugadores visitantes se enfrentaron a sus hinchas, luego de la primera detención del partido.
Tras la reanudación, los aficionados sacaron otro lienzo en contra de Hopp.
Ante la negativa de los hinchas del Bayer a deponer su actitud, ambos clubes tomaron una determinación catalogada de histórica.
Y es que rechazaron la idea del juez del compromiso de reanudar el cotejo, por lo que en los últimos trece minutos del encuentro, las dos escuadras solo se pasarían el balón y charlarían entre ellos.
La llamativa escena se volvió viral rápidamente producto de la protesta que protagonizaron los jugadores.