Tras las pericias correspondientes, la fiscalía de Arica anunció que las armas que portaban los sospechosos de la muerte de carabineros en la frontera con Perú, no fueron utilizadas en el crimen.
Por esta razón, ambos hombres -F.J.Q.A (69) y su hermano J.T.Q.A (72)- quedaron en libertad este sábado.
Sin embargo, según consigna Emol, el fiscal indicó que aún falta realizar pruebas de ADN a los imputados y luego de esto se permitirá establecer si tienen alguna relación con el crimen.
Por ahora, los hermanos sólo fueron formalizados como autores del delito de tenencia ilegal de armas de fuego.
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