¿Has visto alguna vez un ave con canas? La razón por la que probablemente no
Nunca en su vida, un ave tendrá su plumaje cubierto de canas, ni siquiera cuando, por edad, esté más cerca de la muerte que de la juventud. Un estudio realizado por científicos de la Universidad de Sheffield (Reino Unido), que indaga sobre la diversidad de colores que tienen estos animales en su cuerpo, comprobó las razones de la condición privilegiada que tienen las aves al nunca tener canas.
Es que la variedad de colores que tienen los plumíferos deleita la vista de cualquiera. Sólo basta con dejarse impresionar:
Según lo consigna el diario El País, "los pájaros no pintan sus plumas con moléculas cromáticas, sino que controlan a nivel molecular el material del que están hechas hasta tal punto que pueden regular la luz que reflejan y, por lo tanto, su color. Una alternativa física a los pigmentos y los tintes sumamente sofisticada que, además, aporta viveza y variedad".
Los cientificos se trasladaron hasta la Instalación Europea de Radiación Sincrotrón (ESRF) de Grenoble, en Francia para realizar el estudio basado en las plumas de algunas aves provenientes de la colección del Museo de Ciencias Naturales de Londres.
La conclusión a la que llegaron los investigadores es que las aves son capaces de regular una parte de sus plumas que está compuesta casi como una esponja, y el tamaño de sus "agujeros" para que reflejen diferentes colores que van desde el violeta hasta el blanco, pasando por un azul intenso. "Cuando la luz alcanza la pluma, el tamaño de los orificios de la nanoestructura regula cómo se dispersa la luz y, por lo tanto, qué color vemos", exponen los investigadores en el último número de Scientific Reports.