Georgia Bond y Jack Bowman son dos amigos de Inglaterra que se conocen desde hace varios años. “Siempre nos molestábamos de que éramos hermanos”, afirma Bond en su cuenta de Facebook, sin saber que la broma terminaría siendo realidad.
Ambos chicos fueron concebidos por donación de esperma, y luego de presentar las inquietudes por conocer a sus padres biológicos, se les permitió acceder a la información de sus donantes. Tras una breve investigación, todo apuntó a la posibilidad de tener un parentesco.
“Jack recibió su primera respuesta de que tenía una hermana que había nacido en el 98”, dijo Georgia Bond. Tras esto, decidieron hacerse un examen de ADN, el cual dio positivo.
“Después de muchas semanas de estar esperando, nos dimos cuenta de que yo era su hermana de donación de esperma”, cuenta Bond, afirmando que “soy la persona más feliz del mundo”
“Le digo a todas las personas que son nacidas de donación de esperma que por favor busquen los detalles, porque es la mejor cosa que he hecho en mi vida”, finalizó.
