Con 30 votos a favor, ocho en contra y dos abstenciones el Senado aprobó la designación de la abogada constitucionalista Ángela Vivanco como nueva ministra de la Corte Suprema.
El nombre de la doctora en derecho y docente de la Universidad Católica había sido propuesto por el Presidente Sebastián Piñera para reemplazar el cupo dejado por el ministro Patricio Valdés, quien deja de ser ministro tras cumplir el límite de edad establecido por la ley.
Sin embargo, la aprobación de la propuesta estuvo en entredicho debido a las divisiones que generó en los parlamentarios de la ex Nueva Mayoría por su carácter conservador. Incluso, los senadores del PS votaron en contra de la designación (con la excepción de José Miguel Insulza que se abstuvo), pero aún así superó el mínimo de 29 sufragios que necesitaba para ser ratificada, entre ellos los respaldos del ex candidato presidencial Alejandro Guillier.
En concreto, desde el PS critican sus definiciones en torno a la despenalización del aborto en tres causales, donde enfatizó la defensa de la vida "desde la concepción" y aseguró que en la causal de violación la normativa "renunciaba" a perseguir al autor del delito. Adicionalmente, en la colectividad recuerdan que fue Vivanco quien lideró el recurso de protección de la UC en defensa de la objeción de conciencia institucional.
"Las mujeres del país han levantado la voz para pedir lo que en justicia merecen, por más derechos y mayor igualdad. Ángela Vivanco va en la línea contraria. Nos piden que votemos en contra nuestras convicciones. Por ello, la bancada PS vota en contra", afirmó el senador y presidente de la colectividad, Álvaro Elizalde.
La abogada, además, es conocida por haber sido presidente del desaparecido Partido de Unión de Centro Centro Progresista (UCCP) y por haber sido candidata a diputada por RN.