Tras el presunto ataque "químico" en Siria, que dejó este martes al menos 58 muertos y unos 170 heridos —y del que varios países acusaron al régimen de Bashar Al Asad—, el Gobierno de Chile condenó el uso de armas de este tipo.
A través de un comunicado, el Ejecutivo expresó su "categórico rechazo al empleo de armas químicas por cualquier actor, en cualquier lugar y bajo cualquier circunstancia, por contravenir el Derecho Internacional, el Derecho Internacional Humanitario y los Derechos Humanos".
Asimismo, emplazó a las partes en conflicto a "cesar las hostilidades y actuar conforme a las normas básicas de Derecho Internacional Humanitario y del Desarme", respetando de esta manera la prohibición completa de emplear armas de destrucción masiva contra civiles.
"Nuestro país seguirá con atención esta situación, y continuará respaldando las investigaciones en el marco de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), así como aquellas que realiza el Mecanismo Conjunto de Investigación ONU – OPAQ", añadió el Gobierno en el escrito.
Por último, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas y aseguró que apoyará las investigaciones internacionales para la identificación de los responsables y su posterior proceso en la Justicia.
Esta jornada el Consejo de Seguridad de la ONU inició una reunión para abordar las denuncias de un ataque con armas químicas en Siria, que dejó decenas de muertos, incluidos niños. Fue en este contexto que Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos presentaron un borrador de resolución pidiendo una investigación exhaustiva del ataque.
En tanto, Estados Unidos amenazó con una acción unilateral si la ONU no responde en forma adecuada a un presunto ataque.