El ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, planteó este lunes un impuesto al diésel para financiar el transporte público.
Y es que, en conversación con Radio ADN, el secretario de Estado se refirió a los altos índices de movilidad que han registrado las ciudades tras dos años de pandemia, debido a la normalización en el sistema de transporte público y al aumento del mercado automotriz.
Acerca de esto, y especialmente al aumento del tráfico y los tacos en las calles principales como uno de los problemas que se ha evidenciado en los últimos días, el ministro manifestó que “este tema de que todos nos movamos en automóvil hace que la ciudad sea insufrible, y eso es lo que vemos en Santiago y otras ciudades de regiones”.
“Eso exige a la autoridad a tomar medidas que no son populares, por empujar modos de transporte que las ciudades necesitan ver. Ahí surge con mucha fuerza el transporte colectivo, como buses, Metro, y el transporte en bicicleta o no motorizados”, continuó.
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“Creo que la invitación para aquellos que tienen la opción de poder reflexionar su manera de viajar, es movernos hacia una forma de viajar que sea coherente con una ciudad más sustentable”, destacó Muñoz.
El ministro también apuntó a la forma en cómo está estructurada la ciudad. “Es muy malo que tengamos a la gente de escasos recursos en un sector de la ciudad, y las oportunidades en el sector oriente, cada vez más lejos de donde la gente vive”, comentó.
“Hay un tema grande de planificación territorial que tenemos que abordar y del que nos hemos hecho los lesos, pero nosotros necesitamos una ciudad mucho más cohesionada e integrada que la que tenemos”, afirmó.
Muñoz también destacó que “sería perfecto” un impuesto al diésel para financiar el transporte público.
“Lo ideal, es que este tipo de medidas piloto, es que la ciudad tenga transporte público gratuito y ver cómo funciona (…) Justamente, lo que uno quiere es fomentar el transporte público desincentivando el uso del automóvil, y una forma para esto es el aumento del combustible”, señaló.
Sin embargo, sobre el impuesto al diésel y a la gasolina, reconoció que “es un tema que trasciende a lo que pueda opinar el ministro de Transporte. Son políticas de Estado y que tienen un impacto financiero mucho más amplio”.
“A fin de mes, el panel de expertos seguramente nos va a sugerir que la tarifa del transporte público debería subir para poder ir calzando ingresos con costos”, cerró.
