La decisión adoptada este sábado por la junta nacional de la Democracia Cristiana de llegar directo a primera vuelta en noviembre podría provocar algo más que desaveniencias con algunos partidos de la Nueva Mayoría y la candidatura de Alejandro Guillier.
Lo anterior dado que el Servel establece que los partidos políticos no pueden presentar a candidatos independientes a la primera vuelta y solo pueden hacerlo con militantes propios inscritos en la colectividad.
Al eliminarse la opción de ir a primarias al interior del bloque se abren dos posibilidades para llevar adelante la aspiración presidencial del senador por Antofagasta. La primera es que Guillier junte las firmas necesarias para inscribir su candidatura legalmente en el Servel. Y la segunda es que el abanderado radical deberá afiliarse a algún partido para que este pueda elevar la candidatura ante el Servel.
En el caso de elegir la segunda alternativa, la ley establece que este procedimiento debe hacerse "con a lo menos dos meses de anticipación al vencimiento del plazo para presentar las declaraciones de candidaturas y no haber sido afiliado de otro partido político dentro de los nueve meses anteriores al vencimiento de dicho plazo", según lo que establece el artículo 4 de la ley 18.700 sobre Votaciones y Escrutinios.
Sobre esto se refirió el senador PPD, Jaime Quintana en La Tercera quien criticó a la falange y sentenció que “esto es la consecuencia de no pensar en la centro izquierda. Es un regalo para la derecha. Lo razonable es que Guillier fiche en el PR”.